Meditación para niños

Meditación para niños (Ramiro Calle) Ed. Kairós

ISBN: 9788499884974

La meditación ayuda al niño a conocerse y regularse mejor, a calmar y esclarecer su mente, a afirmar su carácter y desarrollar su voluntad. El entrenamiento metódico en la meditación intensifica su capacidad de concentración, favorece su equilibrio psicosomático y le otorga más seguridad en sí mismo. El autor recoge en esta obra, con precisión y claridad, las principales enseñanzas y técnicas de meditación para niños.

Ramiro A. Calle

es un maestro y escritor de yoga, pionero en introducir en España esta disciplina. Ha viajado en más de cincuenta ocasiones por los países de Asia y ha entrevistado a los más relevantes monjes y especialistas del budismo.
Ha escrito más de un centenar de libros de diversas temáticas, en su mayoría filosóficas o espirituales, aunque también recopilaciones de cuentos y guías de viajes.
Desde 1971 dirige el mayor centro de yoga en España, el Centro de Yoga Shadak, por el que han pasado más de trescientas mil personas. También ha impartido clases en la Universidad Autónoma de Madrid, y ha dado conferencias en otros lugares.

• Páginas: 144

• Tamaño

Sumario

Agradecimientos    11
Introducción    13
1. La misteriosa mente del niño    17
2. Cuando estudio, estudio; cuando juego, juego    27
3. Meditación: senda de calma y alegría    41
4. Preliminares, obstáculos y aliados    49
5. La respiración: torrente de vitalidad    65
Respiraciones abdominales o diafragmáticas    69
Respiraciones medias o intercostales    69
Respiraciones altas o claviculares    70
Respiraciones completas o integrales    71
Respiraciones completas con retención    72
Respiraciones purificadoras    72
Respiraciones rítmicas    73
Respiraciones cuadradas    73
Respiraciones con visualización de energía    74
Respiración vigorizante    75
Respiración sedante    75
Respiración alternada    75
6. Vivir el cuerpo    77
El saludo al sol    79
Consciencia al saltar    86
La danza libre    87
El ejercicio de los ojos cerrados    87
La meditación ambulante o marcha consciente 88
El ejercicio de la detención    88
El arquero    89
El danzante    90
El tirador de pértiga    91
Marcha en el mismo sitio    92
Trepando por la cuerda    93
El árbol    94
Caminar descomponiendo los movimientos    94
7. Atención a la respiración    95
La atención a la sensación táctil del aire    96
La atención al curso de la respiración
contando y sin contar    96
La atención al punto de confluencia
entre la inhalación y la exhalación    97
La atención al dentro y fuera de la respiración    97
La atención a la respiración
coloreándola    98
La atención a la respiración
como fuente de vitalidad    98
8. Atención al cuerpo    99
La atención a las sensaciones
en las palmas de las manos    100
La atención a las sensaciones
en las plantas de los pies    101
La atención a la postura corporal    101
La atención a la postura corporal
elevando un brazo    102
La atención a los puntos de contacto    102
La atención a las sensaciones del cuerpo
mientras se recorre mentalmente    103
9. Concentración pura    105
Concentración en la llama de una vela    106
Concentración en una figura geométrica    106
Concentración en un color    106
Concentración en un disco de luz    107
Concentración en el entrecejo    107
Concentración en una pequeña
esfera de luz blanca    107
Concentración en una flor    108
Concentración en un sonido    108
Concentración en el tacto    108
Concentración caminando
con los pies descalzos    109
Concentración en un fondo negro    109
10. Visualización    111
Visualización de las aguas de un lago    111
Visualización de la bóveda celeste    112
Visualización de la luz blanca    112
Visualización del punto de luz dorada    113
Visualización de uno mismo    113
11. Cuatro ejercicios mentales
para dominar el pensamiento    115
La pantalla mental    115
Estar alerta y sosegado    116
El silencio interior    116
Cortar los pensamientos en su raíz    118
12. La relajación meditativa    119
Contraer y relajar    122
Apéndice I: tabla de posturas    125
Tabla de asanas    126
Postura de la cobra    126
Postura de la pinza    128
Postura de la torsión    129 Media postura de la cobra    130
Postura de extensión sobre la pierna    131
Postura de la vela    132
Apéndice II: cómo enfocarlo al niño    135
¿Qué es la meditación?    135
¿Para qué la meditación?    136
La meditación no es una obligación    137

Introducción

Hace más un año publiqué en la Editorial Kairós mi obra Yoga para niños, que ha obtenido una excelente acogida. Entonces ya le comuniqué a mi buen amigo Agustín Pániker -editor de Kairós- mi intención de poder escribir y publicar una obra en la que se abordara el tema de meditación para niños, incluyendo una información sucinta, pero muy precisa a tal fin y, sobre todo, incorporando técnicas y métodos con los que niños y adolescentes pudieran beneficiarse. Ahí quedó mi propuesta. Meses después Agustín y yo convenimos en la necesidad de publicar una obra de este tipo. Unas semanas más adelante vino al centro de yoga Shadak (que dirijo desde hace cuarenta y cuatro años) el gran maestros cingalés de meditación Upul Gamage. Nos dio un curso intensivo de meditación a lo largo de dos tardes. La última mañana de su estancia en Madrid vino a visitarme a casa y estuvimos charlando un par de horas. Le pregunté qué le parecería un libro de meditación para niños y me contestó rotundamente que era muy
interesante y conveniente; insistió en la necesidad de que los niños aprendan a meditar. De hecho, es mucho el provecho que niños y adolescentes pueden obtener de la práctica de la meditación, que se convertirá así en una gran aliada el resto de sus vidas. La meditación enseña a meditar, a dominar la mente, y el niño puede ir familiarizándose con su práctica y luego mantenerla a lo largo de su vida. La meditación no es un lujo, sino una necesidad específica, de ayuda tanto para niños como para ancianos, sanos o enfermos, y cualesquiera que sea la condición de la persona.
Es importante que el niño tome la ejecución de los ejercicios como un juego si es muy pequeño y en cualquier caso como una especie de desafío o aventura que pueda resultarle excitante y no tediosa. Aquí tiene un papel fundamental el instructor.
No me voy a alargar más en esta introducción, pero sí diré que he escrito este libro con gran entusiasmo, convencido plenamente de que la meditación puede hacer a los niños más sosegados, atentos, cooperantes y dichosos. Comento en muchos de mis seminarios o en mis clases que el mejor consejo que me dieron a mí es «Medita», y es el mejor que yo puedo dar a los demás. Este libro está escrito para padres o familiares que quieran introducir, orientar e instruir a sus hijos en la meditación y, por supuesto, para instructores y profesores. Es una obra muy práctica, porque, como decimos en la tradición del yoga, «vale más un gramo de práctica que toneladas de teoría».
RAMIRO CALLE