Quiromancia para todos (Cheiro) Ed. Obelisco  ISBN: 9788491111092

Quiromancia para todos

Referencia: 9788491111092
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Una obra práctica sobre el estudio de las líneas de la mano con más de 60 ilustraciones

 
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Es sabido que cualquier cara puede ser una mera máscara, que hay personas que son magníficas actuando y pueden engañar incluso a los mejores psicólogos. En cambio, es difícil enmascarar las manos con un simple esfuerzo, pues el carácter que expresan es la verdadera naturaleza del individuo, un carácter que se ha formado a través de la herencia adquirida o se ha desarrollado con la persona a lo largo de los años.
El presente trabajo de Cheiro, sin duda el quiromántico más conocido del siglo pasado, contiene una información nunca antes publicada. Tras su lectura, una simple mirada a las líneas de la mano de una persona puede ayudarnos a comprender las principales características de su personalidad y su idiosincrasia.
Tras ofrecernos un breve resumen de la historia de la quiromancia a través de los siglos, el autor repasa las líneas, los montes, la forma y significado de uñas, dedos y manos, para culminar con unos sabios y prácticos consejos dirigidos tanto a quienes desean acercarse a esta ciencia milenaria como a aquellos que pretenden estudiarla a fondo.

CHEIRO

William John Warner, más conocido como Cheiro, fue un célebre quiromante, ocultista y astrologo irlandés de principios del siglo XX. Su apodo, Cheiro, deriva de la palabra Cheiromancy, es decir, «quiromancia». Durante su carrera profesional adquirió gran renombre por el uso y prácticas de esta forma de adivinación y por sus predicciones tanto de la vida de personajes famosos como de acontecimientos mundiales. Impartió clases de quiromancia, astrología y numerología caldea.

  • Formato: 13,5 cm x 21 cm
  • Páginas: 192
  • Encuadernación: Rústica
  • Traducción: Raquel Mosquera

Índice

PARTE I
QUIROMANCIA
Capítulo I. Breve resumen de la historia del
estudio de las manos a través de los
siglos hasta nuestros días     9
Capítulo II. La línea de la cabeza o las indicaciones
de la mentalidad      15
La línea de la cabeza y sus variaciones     17
La línea de la cabeza unida a la línea de la vida     23
La línea de la cabeza separada de la línea de la vida      26
La línea de la cabeza y sus signos secundarios     29
Cambios en la línea de la cabeza      32
Cruces y cuadrados en relación con la línea
de la cabeza     36
Doble línea de la cabeza     38
La línea de la cabeza en los siete tipos de manos     39
Capítulo III. La línea de la vida y sus variaciones     43
La línea de la vida     46
Líneas ascendentes     48
La línea de Marte o línea de la vida interior     51
Capítulo IV. La línea del destino     53
Nacimiento en la línea de la vida     56
Nacimiento en la muñeca     56
Nacimiento en el monte de la Luna     57
Nacimiento en el centro de la palma     61
Líneas de influencia     63
Doble línea del destino     63
Capítulo V. La línea del Sol      67
Capítulo VI. La línea del corazón como indicadora
de la naturaleza afectiva y emocional     73
Signos relacionados con el matrimonio     78
Líneas de influencia en la línea del destino sobre el monte de Venus y otros signos que también tienen un significado
en relación con el matrimonio     82
Líneas de influencia sobre el monte de Venus     84
Líneas que denotan hijos, su sexo y otros asuntos
que les conciernen     85
Capítulo VII. La línea de la salud o hepática     87
Capítulo VIII. Las líneas secundarias de la mano     91
El cinturón de Venus      91
El anillo de Saturno     92
Los brazaletes     94
La línea de la intuición y la vía lasciva     95
La vía lasciva      96
La cruz mística, el anillo de Salomón     97
El anillo de Salomón     98
Viajes, travesías y accidentes     98
Accidentes    101
La isla, el círculo, el lunar y la rejilla      101
El círculo      103
El lunar      103
La rejilla      103
La estrella     103
La cruz      105
El cuadrado     106
Capítulo IX. Diferentes clases de líneas      107
La mano derecha e izquierda      108
El gran triángulo     111
El cuadrángulo      111
Capítulo X. Cómo predecir el tiempo y las fechas
de los principales eventos de la vida     113

PARTE II
QUIROLOGÍA
(LA CIENCIA DE INTERPRETAR LA FORMA DE LAS MANOS)
Capítulo I. El estudio de la forma de la mano    119
Los siete tipos de manos      120
La mano elemental      120
La mano de tipo cuadrado     121
La mano espátula      123
La mano filosófica     124
La mano cónica o artística      125
La mano psíquica o idealista      127
La mano mixta     128
Capítulo II. El pulgar     129
Capítulo III. Los dedos: longitud entre ellos.
El fino y el nudoso      135
Diferentes formas de los dedos     137
Capítulo IV. Las uñas de la mano      139
Uñas largas     139
Uñas cortas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .     .      140
Uñas largas y estrechas     142
Uñas planas      142
Las lunas de las uñas     142
Capítulo V. Los montes de la mano y su significado      143
Los montes de la mano     144
El monte de Marte     146
El primer monte de Marte     147
El segundo monte de Marte      149
El monte de Júpiter y su significado     151
Salud     153
El monte de Júpiter (negativo)      153
Salud     154
El monte de Saturno y su significado     154
Salud     156
El monte de Saturno (negativo)     157
Salud     158
El monte del Sol y su significado . . . . . . . . . . . . . . .     .      158
Salud     160
El Monte del Sol (negativo)      160
Salud     162
El monte de Mercurio y su significado     162
El monte de Mercurio (positivo)      163
Salud     165
El monte de Mercurio (negativo)     165
Salud     166
El monte de la Luna y su significado     167
Salud     170
El monte de la Luna (negativo)     170
Salud     171
El monte de Venus y su significado    172
Salud     174
El monte de Venus (negativo)      174
Salud     176
Capítulo VI. Consejos para el estudiante.
El mejor medio para hacer moldes
o tomar impresiones de las manos     177
Ilustraciones
Las líneas de la mano     6
1. Las tres posiciones principales del inicio de la
línea de la cabeza     18
2. La línea de la cabeza unida a la línea de la vida
y sus terminaciones      25
3. La línea de la cabeza separada de la línea
de la vida     27
4. Islas en la línea de la cabeza     30
5. Más variaciones de la línea de la cabeza     33
6. La línea de la cabeza y la del corazón unidas      35
7. Doble línea de la cabeza, cruces y cuadrados      37
8. La línea de la vida y secciones de influencias
de los montes     44
9. La línea de la vida y sus variaciones      49
10. La línea de la vida, la línea de Marte
y otros signos     51
11. La línea del destino y sus modificaciones . . . . . .     .      57
12. La línea del destino y sus variaciones      58
13. La línea del destino y sus modificaciones . . . . . .     .      62
14. La línea del destino, islas y otros signos      64
15. La línea del Sol y sus modificaciones      69
16. La línea del corazón y sus variaciones     74
17. Líneas del matrimonio     79
18. Líneas del matrimonio y líneas de influencia
que ayudan a indicar el matrimonio     83
19. La línea de la salud     88
20. El cinturón de Venus, el anillo de Saturno, los brazaletes, la línea de la intuición
y la vía lasciva      93
21. Viajes, travesías, accidentes y líneas descendentes
de los montes     99
22. La isla, el círculo, el lunar, el cinturón,
la estrella y el cuadrado      102
23. Marcas y signos secundarios     104
24. Marcas y signos secundarios     109
25. El gran triángulo y el cuadrángulo     110
26. Momentos y fechas de acontecimientos
importantes     115

QUIROLOGÍA
LISTA DE ILUSTRACIONES


FIGURA 1. PARTE II     122
1. La mano elemental
2. La mano cuadrada o útil
3. La mano espátula
4. La mano filosófica
FIGURA 2. PARTE II.     126
La mano cónica o artística
La mano psíquica La mano mixta
FIGURA 3. PARTE II     131
El pulgar de cachiporra El pulgar flexible El pulgar rígido
El pulgar acinturado El pulgar recto
El pulgar elemental
FIGURA 4. PARTE II     136
El cuadrado con articulaciones finas
El puntiagudos
El nudoso
FIGURA 5. PARTE II     141
Uñas cortas y cuadradas. Débil acción del corazón
Uñas en forma de concha. Fuerte tendencia a las parálisis
Delicadeza de garganta
Fragilidad pectoral y bronquial
Pulmones delicados
Debilidad de la columna
FIGURA 6. PARTE II. LOS MONTES DE LA MANO     145
El monte de Venus
El monte de Marte
El monte de Júpiter
El monte de Saturno
El monte del Sol
El monte de Mercurio
El monte de la Luna

Parte I
Quiromancia
Capítulo I
Breve resumen de la historia del estudio de las manos a través de los siglos
hasta nuestros días


Creo que el éxito que tuve durante los veinticinco años en los que estuve conectado a este estudio fue, principalmente, debido al hecho de que a pesar de que mi estudio principal eran las líneas y la formación de las manos, no me limité sólo a esa página en particular del libro de la naturaleza. Traté por todos los medios de estudiar cada fase de pensamiento que pudiera arrojar luz sobre la vida humana. En consecuencia, utilicé los propios surcos de la piel o el vello que encontramos en las manos como lo haría un detective con una pista para acumular pruebas. Descubrí que las personas eran escépticas ante un estudio de este tipo simplemente porque el tema no se les había presentado de una manera lógica.
Hay cientos de hechos relacionados con la mano de los que las personas rara vez han oído hablar, si es que alguna vez lo han hecho, aunque muchos de ellos fueron descubiertos hace muchos años. Meissner, por ejemplo, demostró que los corpúsculos se distribuían de una manera peculiar en la
propia mano. Averiguó que en las puntas de los dedos había ciento ocho formando un cuadrado, con cuatrocientas papilas; que producían ciertas crepitaciones o vibraciones distintas y que eran más numerosos en las líneas rojas de la mano y, por extraño que parezca, se encontraban en filas rectas individuales en las líneas de la palma. Se realizaron experimentos relacionados con estas vibraciones y se demostró que, tras estudiarlas un poco, uno puede claramente detectar y reconocer las crepitaciones en relación con cada individuo. Aumentaban
o    disminuían en cada fase de salud, pensamiento o emoción, y se extinguían en el momento en que la muerte vencía a su víctima. Unos veinte años más tarde, se realizaron experimentos con un hombre en París que tenía un sentido del oído anormalmente agudo (la compensación de la naturaleza por su falta de vista, ya que había nacido ciego). En muy poco tiempo este hombre podía detectar el más mínimo cambio
o    irregularidad en estas crepitaciones y, a través de ellos, era capaz de decir con maravillosa precisión la edad que tenía una persona y lo cerca que estaba de contraer una enfermedad, e incluso de la muerte.
El estudio de estos corpúsculos también fue seguido por sir Charles Bell, quien demostró que cada corpúsculo contenía el extremo de una fibra nerviosa y estaba en conexión inmediata con el cerebro. Este gran especialista también demostró que cada porción del cerebro estaba en contacto con los nervios de la mano y, más particularmente, con los corpúsculos que se encuentran en las puntas de los dedos y las líneas de la mano.
La detección de delincuentes mediante la toma de huellas de las puntas de los dedos y las marcas del pulgar es ahora utilizada por la policía de todos los países, y miles de criminales han sido rastreados e identificados por este medio.
Hoy en día, en Scotland Yard se puede ver una completa biblioteca dedicada a libros sobre este tema y a las recopila-
ciones que la policía ha hecho y, aun así, se mofaron de esta idea cuando monsieur Bertillon y la policía francesa comenzaron por primera vez la detección de criminales mediante este método. Si se pudieran superar los prejuicios en contra de un estudio completo de la mano, la policía recibiría una gran ayuda mediante el estudio de las líneas de la palma de la mano y la adquisición de conocimientos de lo que significan estas líneas, especialmente en cuanto a la mentalidad y la inclinación del cerebro en una dirección u otra.
Es bien sabido que, incluso si la piel de las manos se quemara o fuera destruida por un ácido, en poco tiempo las líneas volverían a aparecer exactamente como estaban antes, y lo mismo sucede con los relieves o «espirales» en la piel de las puntas interiores de los dedos y el pulgar.
El uso científico de un estudio de este tipo también podría ser muy valioso para prever tendencias hacia la locura, etcétera.
Sir Thomas Browne, en su Religio Medici, después de referirse a la fisonomía, dice:
«Ahora bien, además de estos rasgos en nuestras caras hay ciertas figuras misteriosas en nuestras manos que no me atrevo a llamar meros guiones o trazos al azar, ya que están delineadas por un lápiz que nunca funciona en vano, y por ello presto especial atención, porque llevo en mi propia mano lo que nunca podría leer ni descubrir en otra».
Pero los prejuicios son difíciles de combatir, y, en consecuencia, un estudio que podría prestar una ayuda incalculable a la humanidad está ahora abandonado en gran medida. Sin embargo, no se puede negar que este fascinante estudio fue practicado y seguido por algunos de los más grandes maestros y estudiantes de otras civilizaciones.
Si estos antiguos filósofos eran más ilustrados que nosotros o no es cuestión de disputa, pero el único punto y el más importante que se ha admitido es que en aquellos tiempos el mayor estudio de la humanidad era el hombre. Por tanto, es razonable suponer que sus conclusiones tienen más probabilidades de ser correctas que las de una época como la nuestra, principalmente famosa por sus instrumentos de destrucción.
Este estudio de las manos se remonta a las formas más tempranas e ilustradas de la civilización. Se ha llevado a cabo por las mentes más brillantes de todas esas civilizaciones, mentes que han dejado sus filosofías mentales y sus monumentos pa- ra que nos maravillemos ante ellos. La India, China, Persia, Egipto, Roma, todas ellas en su estudio de la humanidad han aportado mucho con su estudio de la mano.
Durante mi estancia en la India, algunos brahmanes (descendientes de la casta Joshi, famosos desde tiempos inmemoriales por sus conocimientos en temas ocultos) a quienes tuve la suerte de conocer íntimamente, me permitieron examinar y tomar extractos de un extraordinario libro sobre este tema que consideraban casi sagrado, y que perteneció al gran pasado del Indostán.
A medida que la sabiduría de los hindúes se extendía por todo el mundo, también lo hacían las teorías e ideas acerca de este estudio y se practicaban en otros países. De manera similar a la forma en que la religión se adapta a las condiciones del país en que se propaga, así se ha dividido en varios sistemas. Sin embargo, debemos a los días de la civilización griega la forma clara y lúcida actual del estudio. La civilización griega, en muchos sentidos, se ha considerado la más grande e intelectual del mundo, y es aquí donde la quiromancia (del griego, r¡fl, «mano») creció y fue apoyada ante los ojos de aquellos que nos han dado leyes y filosofías que empleamos hoy y
cuyas obras se enseñan en todas nuestras universidades y escuelas principales.
Es un hecho bien conocido e indiscutible que el filósofo Anaxágoras no sólo enseñó, sino que practicó este estudio. También encontramos que Hispanus descubrió en un altar dedicado a Hermes un libro sobre quiromancia, escrito en letras de oro, que envió como regalo a Alejandro Magno, como «un estudio digno de la atención de una mente sublime e inquieta». En lugar de ser seguido por «débiles mentales», encontramos, por el contrario, que contaba entre sus discípulos con sabios como Aristóteles, Plinio, Paracelso, Cardamis, Alberto Magno, el emperador Augusto y muchos otros hombres notables.
Esto nos lleva a la época en que el poder de la Iglesia empezaba a sentirse fuera del dominio y la jurisdicción de la religión. Se dice que los primeros Padres estaban celosos de la influencia de esta ciencia del viejo mundo. Sea verdad o no, encontramos que fue duramente denunciada y perseguida por la Iglesia primitiva. Siempre ha ocurrido que la historia de cualquier credo o secta dominante es la historia de la oposición al conocimiento, a no ser que ese conocimiento venga a través de ella. Este estudio, por lo tanto, descendiente de los «paganos», ni siquiera fue sometido a juicio. Fue denunciado como hechicería y brujería; el diablo fue evocado como el padre de todos esos estudiantes, y el resultado fue que mediante esta dura persecución el estudio fue prohibido y cayó en manos de vagabundos, mendigos y gitanos. A pesar de esta persecución, es interesante y significativo señalar que casi el primer libro impreso fue un trabajo sobre quiromancia, Die Kunst Ciromantia, impreso en Augsburgo en el año 1475.
Al examinar este tema se encontrará que en el estudio de la humanidad se reconoció que, así como en la cara había una posición natural de la nariz, los ojos, los labios, etcétera,
también en la mano había una posición natural de lo que se conoce como la línea de la cabeza, la línea de la vida, y demás. Si éstas se encontraran en una posición poco natural, igualmente serían indicaciones de tendencias antinaturales. Sin duda, llevó años de estudio nombrar estas líneas y marcas, pero hay que recordar que este curioso estudio es más antiguo que cualquier otro en el mundo.
En el hebreo original del libro de Job (Job 16, 7), nos encontramos con estas significativas palabras: «Dios creó signos o sellos en las manos de todos los hijos de los hombres, para que los hijos de los hombres conozcan su obra».
Del mismo modo que un estudiante de anatomía puede desarrollar todo el sistema a partir del examen de un solo hueso, una persona puede desarrollar a partir de la mano, dejando de lado toda superstición o incluso misticismo, toda la acción del sistema y remontar cada efecto a su causa.
Hoy en día la ciencia del presente viene al rescate de la llamada superstición del pasado. En todo el mundo, los científicos están poco a poco dejando de lado los prejuicios y comenzando a estudiar cuestiones ocultas. Tal vez los «porqués» de esas cosas algún día puedan ser explicados fácilmente al igual que muchas de las maravillas científicas aparentemente inexplicables que ahora aceptamos sin ningún tipo de duda.

 
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