Decisiones kármicas, por Djuna Wojton. ISBN: 9788491110590

Decisiones kármicas

Referencia: 9788491110590
12,00 €
Impuestos incluidos

Decisiones kármicas, por Djuna Wojton. ISBN: 9788491110590

Cómo tomar la decisión correcta
puede crear una felicidad duradera

Cantidad
- Envío en 24 - 48 horas
Ábrete a una mayor satisfacción en la vida, tanto en una vertiente profesional y de relaciones personales como en tu yo interior. Con Decisiones kármicas, eliminarás los bloqueos que te inmovilizan y podrás crear una vida apasionante y enriquecedora que elevará tu espíritu y te entusiasmará. Conecta con la consciencia de tu alma a través de los ejercicios, los cuestionarios y la formulación de los patrones kármicos que te muestra este libro.
Djuna Wojton comparte en esta obra su nueva perspectiva sobre las leyes del karma y de la atracción, y nos ayuda a conseguir la vida que deseamos. Descubre cómo puedes incorporar en tu día a día un amplio abanico de expresiones, como la meditación, los yoga sutras, el trabajo energético y otras. Siguiendo tres sencillos pasos (aclarar, limpiar y crear) podrás dejar atrás problemas recurrentes y autolimitaciones y avanzarás por el camino del crecimiento personal, la intuición y la sabiduría del alma.
 
DJUNA WOJTON

Es hipnoterapeuta, consultora espiritual y especialista en Reiki. Su experiencia de más de veinte años como sanadora espiritual, regresionista y astróloga la ha llevado a dirigir un centro, el Djunaverse Center for Healing Arts, en el que realiza sesiones personales y en grupo; sus vídeos sobre previsiones astrológicas semanales alcanzan el millón de suscriptores. Es también autora de la obra Sanación kármica (Luciérnaga, Barcelona, 2008)

Aclaración

Los ejercicios y las meditaciones propuestos en este libro no sustituyen la atención médica o psiquiátrica que cada uno puede necesitar. Los procesos que propongo suponen un reto que las personas emocionalmente equilibradas superan mejor. Si tienes un problema, te ruego que busques la ayuda adecuada. Si asistes a terapia, consulta con tu terapeuta antes de explorar las decisiones kármicas.
Todos los nombres de clientes y detalles de sus circunstancias que aparecen en el libro se han modificado para proteger su privacidad.
Todas las partes de este libro están protegidas por la ley de derechos de autor. Las meditaciones sólo son para uso personal.

introducción
¿Estás preparado para
hacer un cambio?

Te apetece dar un cambio a tu vida, pero, por lo visto, no lo consigues. Quizá guardaste tus sueños en un baúl hace tantos años que ya ni siquiera te acuerdas de cuáles eran. Nunca corriste una maratón, ni escribiste un libro, ni diste la vuelta al mundo en un crucero, ni aprendiste a navegar.
O a lo mejor también es posible que, después de tantos años de matrimonio, sientas que te estás alejando de tu pareja. O, quizá, tras tanto tiempo de soltería, te hayas resignado a no tener nunca pareja.
O puede que haya llegado el momento de dar un giro al ámbito profesional. Estás aburrido y tienes un trabajo sin expectativas que apenas te permite llegar a final de mes, pero nunca te has planteado hacer algo que realmente te satisfaga.
Siempre es más fácil buscar razones y excusas por las que no puedes hacer lo que quieres.
Si lo que deseas es conseguir más satisfacción en alguna área de tu vida, ya esté relacionada con el trabajo, las amistades o la autoex-
presión, Decisiones kármicas te enseñará cómo hacerlo. A través de la sanación de problemas antiguos, de la conexión con la conciencia de tu alma y del diseño de un plan para un futuro más pleno descubrirás cómo empezar. Los estudios y las historias que presento en el libro ilustran los conocimientos y los principios espirituales que te permitirán volver a situarte en el camino de tus sueños. Te presentaré una serie de cuestionarios que te prepararán para trabajar en tus problemas más internos. Y, por último, los ejercicios, las meditaciones y la fórmula de los tres pasos de los patrones kármicos te ayudarán a liberarte de los bloqueos y las creencias que te limitan y te inmovilizan para que puedas dar los pasos necesarios para crear una vida que te guste.
Igual que un explorador que se aventura en un terreno desconocido y descubre cosas nuevas cada día, verás el mundo con una mirada más sabia, y cada capítulo apoyará y alimentará la creciente conciencia de ti mismo y tu confianza. La experiencia de quién eres se ampliará a medida que aumentan tus opciones y, como consecuencia de esto, serás capaz de conseguir más cosas y, por tanto, de estar más satisfecho con la vida de lo que jamás creíste que estarías.
Karma
Karma es una palabra sánscrita que significa «acción». Por tanto, está claro que no puedes evitarlo, porque la vida está constituida por movimiento.
Seguramente conoces el refrán «Quien siembra vientos recoge tempestades». Esta ley espiritual significa que eres responsable de tus acciones y sus consecuencias. Y es la misma ley espiritual definida por el término karma. Con el karma, tus acciones positivas tienen resultados constructivos, y las acciones negativas tienen resultados destructivos. Así pues, el karma se puede considerar el conjunto de circunstancias que te permite seguir adelante o te frena en la vida.
Tal vez te preguntes por qué a la gente buena le suceden cosas malas y cómo funciona el karma en estos casos. Aquí es donde interviene la teoría de la reencarnación. Desde tiempos inmemoriales, muchas culturas han creído que el nacimiento y la muerte forman parte de un ciclo infinito a través del cual un alma puede curarse y transformarse. El budismo, el hinduismo y muchas religiones basadas en las leyes de la naturaleza incluyen la reencarnación en sus doctrinas. El doctor Brian Weiss, experto en vidas pasadas y autor de grandes éxitos literarios, sostiene que «incluso el cristianismo asumió la reencarnación hasta que, en el siglo iv, el emperador Constantino eliminó cualquier referencia a las vidas pasadas de la Biblia».1
La reencarnación se suma a la creencia de que tu alma elige nacer en la Tierra para aprender y experimentar, porque la vida ofrece nuevas oportunidades para crecer. A veces, una oportunidad así, como consecuencia del karma, se presenta en forma de desafío para ayudarte a ser consciente del impacto que tus acciones tienen en los demás y, así, «equilibrar la balanza». Durante el proceso, estas situaciones complicadas también te obligan a ser más fuerte y mejorar tu carácter. Por tanto, para mí, la sabiduría que extraemos de estas oportunidades son las lecciones espirituales porque, en el fondo, estás aquí para descubrir tu auténtica naturaleza divina.
En este momento, tu vida es una culminación de todo el karma generado por las consecuencias de las acciones y opciones del pasado. Así pues, los ejercicios, las historias y las meditaciones del libro te ayudarán a tomar decisiones de acuerdo con la ley espiritual de «Quien siembra vientos recoge tempestades». Decisiones kármicas te ayudará a comprender que no estás solo, sino que estás conectado con todo y con todos, porque sólo con esa conciencia generarás un karma positivo para ti y para el mundo.
Decisiones kármicas
Siempre importa cómo decides vivir tu vida. Si has optado por actos conscientes y has generado acciones positivas en determinadas áreas de tu vida, y esos actos y esas acciones son afirmativos a nivel vital para ti y para los demás, recogerás las consecuencias mediante el éxito y la plenitud en esos ámbitos. Para mí, estos actos y estas acciones son las «decisiones kármicas».
Decisiones kármicas te enseñará a trabajar con las leyes del karma y, a partir de ahí, a conseguir tus objetivos para que todo el mundo salga ganando. Las personas que se centran únicamente en sus propios objetivos e ignoran los posibles efectos de sus acciones en los demás provocan sufrimiento a todos y todo, y no sólo para las personas, sino también para cualquier tipo de vida del planeta. Así pues, aquí descubrirás cómo tener presentes tus aspiraciones en una perspectiva más amplia; aumentarás tu visión y verás todo el conjunto porque, cuando tienes presente cómo afectarán tus decisiones a tu comunidad, al medio ambiente y al mundo, tomas mejores decisiones.
Aprenderás preceptos éticos que he incluido de varias traducciones de Los yoga sutras de Patanjali, un antiguo texto sagrado de la filosofía hindú. Estos preceptos, que llevan dos mil años de uso en la India, te ayudarán a estar en paz contigo mismo, tu familia y tu comunidad. En lugar de limitarse a facilitar una lista de lo que hay que hacer y lo que no, este código te ayudará a cultivar tu espiritualidad mediante el desarrollo de las cualidades de honestidad, integridad y no violencia. Estos principios te permitirán profundizar en el funcionamiento de tu mente, destapar sistemas de creencias que nos limitan y cambiar tus respuestas automáticas ante la vida. Serás capaz de sustituir la agitación por la calma para poder transformar la forma en que te relacionas con el mundo. Al final del libro, he añadido un glosario para que puedas aprender las definiciones de los términos de otra lengua o desconocidos.
Patrones kármicos
¿Alguna vez has vivido una y otra vez la misma situación angustiosa? Los personajes y el escenario son distintos, pero la temática es la misma. Es como ver un capítulo repetido de una serie; es aburrido y ya sabes cómo acaba, pero lo miras de todos modos. Esas situaciones angustiosas recurrentes son consecuencia de unos comportamientos automáticos que yo denomino patrones kármicos.
Como ya he dicho, tu tiempo en la Tierra te ofrece nuevos desafíos y experiencias únicas, y todo dentro del contexto de aprender más cosas sobre ti mismo. Porque, lógicamente, cuanto más consciente eres de ti mismo, mejor es tu capacidad para responder de forma consciente, y de forma reactiva, antes tales experiencias. Es posible aprender a liberar las tendencias no deseadas y autodestructivas. Incluso cuando tienes la sensación de que algo escapa a tu control, siempre puedes elegir cómo reaccionar.
Pongamos, por ejemplo, que siempre estableces relaciones en las que tú das y el otro recibe, y el resultado es que siempre acabas enfadado y resentido. Por desgracia, mientras no aceptes de forma consciente este aspecto de tu comportamiento, seguirás atrayendo al mismo tipo de persona. A lo mejor la lección que tienes que aprender es crear fronteras sanas (no sacrificar tus necesidades por las de los demás y aprender a decir que no cuando sea necesario) y saber recibir.
Cuando, de forma consciente, tomas decisiones distintas a las del pasado, aunque sigas atrayendo el mismo tipo de circunstancias, habrás aprendido una lección, serás libre para responder de forma más sana y, al final, seguro que experimentarás un resultado más positivo.
La fórmula de los 3 pasos
de los patrones kármicos
A lo largo de los años, he ido desarrollando y enseñando una fórmula de tres pasos que ha ayudado a muchas personas a liberarse de patrones kármicos, a curar heridas del pasado y a crear nuevos inicios. Y ahora quiero compartir este proceso contigo.
1. Aclarar. Ser consciente de que una situación es recurrente y buscar la raíz del problema es el primer paso para solucionarlo.
2. Limpiar. Entender la lección espiritual relacionada con el patrón kármico que has identificado en el paso anterior te libera para reescribir el guión de la vida que deseas.
3. Crear. Comprometerse a realizar una acción determinada que suponga un bien para todos te ayuda a mejorar tu comportamiento y a liberar tu pasión.
Aquí tienes un ejemplo de cómo funciona el proceso. Nadine acudió a mi consulta para una sesión de tarot porque estaba furiosa con su jefe, John. Se dedicaban a vender obras de arte a hoteles y otras grandes empresas. A Nadine le gustaba mucho hablar con la gente, de modo que pensó que el nuevo trabajo le iría muy bien. Tenía que contactar desde cero con varios clientes, hacer el seguimiento y luego conseguir potenciales compradores.
Nadine siempre había creído que era una buena comunicadora; sin embargo, un reciente encontronazo con John en su despacho había hecho que se diera cuenta de que evitaba el tema del dinero.
Cuando John invitó a Nadine a incorporarse en calidad de socia a su negocio de consultoría de arte, hacía diez años que eran amigos. Ella aceptó y los dos acordaron que, mientras ella aprendía el negocio, él se quedaría un porcentaje de las comisiones que ella consiguiera a través de la venta de cuadros y grabados. Puesto que hacía tiempo que eran amigos, Nadine supuso que el porcentaje era
justo. Nunca se sentaron para comentar los detalles y ella no firmó ningún contrato.
Cuando Nadine recibió el primer cheque y vio lo que John se había quedado, se puso muy furiosa. «Llevo dos meses dejándome la piel y trabajando sesenta horas a la semana mientras él ni siquiera aparece por la oficina –dijo, con las mejillas coloradas–. He ido al despacho cada fin de semana mientras él estaba en su casa de la playa. He establecido un nuevo récord y he triplicado las ventas y, sin embargo, él se ha quedado con casi todo el dinero. No es justo».
Cuando me explicó su historia, tuve claro que se trataba de un patrón kármico recurrente; una reacción exagerada es una pista clave para descubrir que tienes un patrón kármico en el interior y que estás preparado para liberarlo. Así pues, apliqué el primer paso de las decisiones kármicas, aclarar, y le enseñé a que cerrara los ojos y respirara.
—¿Cuándo te ha pasado algo parecido en la vida? –le pregunté. Empezó a llorar.
—Es como lo que sucedió con mi matrimonio. Mi exmarido y yo teníamos una cuenta corriente común. Los dos trabajábamos y, sin embargo, él se gastaba casi todo el dinero. No sólo pagaba las pensiones de sus tres hijos de un matrimonio anterior, sino que les enviaba más dinero. Se excedió y eso afectó a nuestra seguridad económica. Creí que si decía algo parecería una egoísta. Así que me guardé mis sentimientos y, al final, nuestro matrimonio fracasó.
A medida que Nadine empezó a identificar y liberar su patrón kármico, entró en acción el segundo paso, limpiar. Le pedí que buscara en su interior y se preguntara: «¿Cuál es la lección espiritual relacionada con este patrón?».
Nadine respiró hondo y dijo:
—También me doy cuenta de que siempre he tenido miedo a dominar en una relación. Creí que me estaba comunicando pero, en realidad, estaba evitando hablar de cosas que me resultaban incómodas. Me metí como socia en este negocio sin ni siquiera firmar
un contrato, porque trabajaba con un amigo y di por sentado que no se aprovecharía de mí.
Luego, me explicó cómo creía que necesitaba cambiar.
—Tengo que responsabilizarme de lo que quiero y no dar por sentado que los demás me cuidarán. Sólo porque alguien sea mi amigo no significa que sepa lo que necesito. En lugar de callarme lo que quiero decir, tengo que ser honesta, abierta y directa cuando hable. Afirmo que puedo hablar con sinceridad con la gente.
Y a continuación llegó el tercer paso, crear. Le pregunté:
—¿Qué acción crees que deberías iniciar que sea buena para ti y para todas las partes implicadas?
Nadine sabía lo que tenía que hacer, y no sólo para salir ganando ella, sino también para ayudar a John. Tenía que hablar y enfrentarse a él respecto a su acuerdo de retribución económica.
Cuando le pedí que marcara una fecha, ella contestó:
—A finales de semana.
Una semana después, Nadine me llamó para comentarme el resultado de su conversación con John.
—Fue de maravilla. John desglosó las cifras, con lo que pude ver claramente cómo repartía el dinero. Acordamos redactar un contrato para establecer cuáles eran mis responsabilidades, mi dedicación y mi retribución.
Nadine no había podido expresarse con libertad en su matrimonio. Años después, se vio inmersa en otra situación que le ofrecía la posibilidad de responder ante un socio de una forma más sana. Cuando «aceptas» la lección espiritual que se te ofrece, eres libre para tomar mejores decisiones.
Toma el control de tu tiempo
Si no estás en contacto con tus prioridades, es natural que caigas en la trampa de simplemente reaccionar ante las situaciones co-
tidianas. Ves que hay bolas de pelos por el suelo y vas a buscar el aspirador. Suena el teléfono. Es tu madre que te dice: «Cariño, se me ha estropeado el ordenador. ¿Puedes venir a ayudarme?». De repente, te conviertes en informático. El perro no deja de ladrar, así que cuelgas para ir a buscar la correa. Mientras paseas al perro te entra hambre. Llegas a casa y abres la nevera. No encuentras nada y vas a la tienda. Y así todo el día.
Por supuesto que siempre habrá circunstancias imprevistas que reclamen tu atención inmediata. Pero si no te centras en lo que en realidad te importa, es muy fácil entrar en la rueda de reaccionar ante los acontecimientos del día de modo que, por la noche, te preguntas qué has hecho con tu tiempo. Querías dedicarte a algo como modificar tu curriculum vitae. O ibas a hacer algo para ti mismo, como practicar yoga, meditar o salir a correr. En su lugar, las exigencias del mundo exterior se han impuesto a tus convicciones internas.
Decisiones kármicas te ayuda a aprender a superar esta trampa y a invertir tus energías en algo productivo. Analizarás cada área de tu vida y descubrirás lo que no funciona. Tanto si es una relación que nos absorbe en el terreno emocional, como conversaciones poco productivas o un hábito de gasto descontrolado, descubrirás patrones de tu vida que tienes que cambiar. Decisiones kármicas te ofrece las herramientas para dejar de perder el tiempo y tomar el control a través del diseño de una vida emocionante, interesante y productiva.
Mi historia
Yo sé lo que es soñar con una vida plena y con significado. Durante años me sentí impotente y asustada porque no establecía contacto con lo que quería y necesitaba. Me sentía desconectada de mi cuerpo y no era consciente de mis emociones. Tenía muchísimas cosas
en la cabeza, casi siempre estaba nerviosa y no me podía concentrar. Desarrollé este patrón de comportamiento durante mi infancia.
Mi madre era muy sobreprotectora. Durante los gélidos inviernos de Cleveland, en Ohio, las aceras estaban cubiertas de nieve y hielo. Mientras me abrigaba para ir al colegio, mamá se acercaba y me decía: «Ten cuidado, que puedes resbalar y quedarte en una silla de ruedas para siempre». Después de oír una y otra vez esas palabras durante años, al final empecé a dudar de que mis piernas pudieran caminar por el hielo.
No me dejaban patinar, ir en bici o escalar los juegos infantiles del parque. Mamá estaba convencida de que tendría un accidente o que me sacaría los ojos y me quedaría ciega para siempre. A los doce años, todavía iba en un triciclo gigante. Si no estaba sentada en la cocina, seguro que corría peligro. Un día, mientras estaba en la puerta de casa jugando con mi Barbie, mi madre me gritó: «Te va a salir un herpes». Si me bañaba en la piscina comunitaria podía sufrir tuberculosis o leucemia. Si tocaba la cocina, podía acabar con una quemadura de tercer grado. Ni siquiera me atrevía a encender el horno por miedo a provocar una explosión.
Escuchar las funestas predicciones de mi madre año tras año pasó factura. Casi siempre me sentía impotente y sin confianza, y estuve a punto de suspender economía doméstica en el tercer año de instituto. Era como si, de repente, tuviera un terrible don telekinético: si me sentaba frente a una máquina de coser, la aguja se rompería. El hilo de la bobina se enredaría de tal forma que ya no podría utilizarse. Mientras me acercaba al fuego en clase de cocina, los pasteles que estaban subiendo en el horno se chafarían, la comida que estaba salteando se quemaría y la salsa se me quemaría.
Mi padre me apoyaba, pero casi nunca estaba en casa. Era un hombre muy trabajador que bebía mucho. Durante el día, era soldador en una cadena de montaje de automóviles Buick y, por la noche, evitaba a mi madre bebiendo hasta caer dormido.
Y mientras yo luchaba con mis miedos y mi ineptitud, el mundo cambiaba deprisa y me facilitó la labor de buscar ayuda. A finales de la década de 1960, las filosofías orientales comenzaban a llegar a Occidente. Había mucha gente que buscaba alternativas a los valores tradiciones y materialistas de nuestra sociedad, y yo era uno de ellos.
Quería encontrar mi luz interior, encenderla y brillar. Empecé a practicar yoga y dejé de comer comida basura. Al cabo de unos meses, mi cuerpo débil y patoso estaba lleno de fuerza y coordinación. Después, aprender a separarme de forma consciente de mis pensamientos acumulados y críticos me trajo la paz. Mi búsqueda espiritual se inició con el yoga y me abrió el apetito para seguir buscando más. Empecé a estudiar una serie de tradiciones espirituales y a reunir mucha sabiduría. Seguir mi camino espiritual me llevó a estudiar yoga en la India y curación chamánica en la selva amazónica. He podido entrevistar a grandes nombres del New Age para mi programa de radio, he bailado la danza del vientre en Egipto y he echado el tarot en un crucero por el Mediterráneo. ¡Cosas que creí que jamás haría! Puede que todas estas actividades parezcan algo normal ahora, pero en el siglo xx eran extraordinarias y aventureras.
No obstante, lo más importante es que mis estudios de yoga, metafísica y terapias holísticas me han permitido ayudar a las personas. Los procesos que he desarrollado en este libro primero me ayudaron a mí. Me liberaron de los miedos de mi madre para poder hacer aquellas cosas que me decía que no podía hacer, como ir de paseo con mi bici de montaña (de dos ruedas), o hacer esquí de fondo, o hacer la vertical sobre la cabeza. Y ahora quiero compartir contigo la sabiduría que he acumulado.
Puedes hacer cosas que nunca imaginaste
Ya he ayudado a miles de personas a crear cambios vitales positivos a través del redescubrimiento de lo que quieren y darles la capaci-
dad para crearlo. Han podido aprender lo que siempre decía uno de mis profesores: «U obtienes el resultado que quieres o las razones por las que no lo obtienes».
A lo mejor tu madre no era sobreprotectora. Puede que la inacción no te parezca ningún problema; o quizá sí. Sin embargo, seguramente habrá ciertas áreas de tu vida en las que sientas que tu expresión está limitada. Tal vez desees una relación más cercana con tu pareja o con tus familiares. A lo mejor te da miedo pedir ayuda, pero estás cansado de hacer todo solo. Puede que te cueste hablar delante de un gran público, pero tienes que hacerlo si quieres progresar en tu carrera.
Aplicando la sabiduría que he ido acumulando a través de mis estudios, Decisiones kármicas te ayudará a identificar las áreas en las que tus miedos te frenan. Aprenderás a reconocer tu miedo y a no dejar que te limite. En ese momento, descubrirás cómo actuar con valentía a pesar de tus miedos y a escoger comportamientos que te conducirán a la vida que deseas.
Tu cuaderno kármico
Para sacar el máximo partido a este libro, necesitarás un diario o un cuaderno grande para anotar tus respuestas a los ejercicios y para documentar tu progreso a medida que vayas creciendo y cambiando. Asegúrate de que sea suficientemente grande y que tenga hojas blancas para poder anotar y dibujar. O, si quieres y te gusta la tecnología, puedes utilizar el ordenador, siempre que tenga un programa para dibujar.
Por favor, ten los siguientes objetos a mano cuando leas el libro y utilízalos para despertar tu creatividad:
– Revistas viejas, tijeras, pegamento y celo para crear collages y mapas del tesoro.
– Rotuladores, lápices o bolígrafos de colores para que los ejercicios de redacción sean más agradables y divertidos.
– Una grabadora digital para grabar y reproducir meditaciones.
– Una agenda, de papel o electrónica, para planificar y gestionar tus proyectos.
– Música relajante para acompañar las meditaciones y ayudar a relajarte.
– Una baraja de cartas del tarot Rider-Waite para practicar la habilidad de visualizar y desarrollar tu intuición. Durante algunas meditaciones, aprenderás a interactuar con los arquetipos del tarot con la finalidad de que se conviertan en tus guías para llegar a los reinos más internos.
Sin embargo, también te beneficiarás del potencial del libro aunque no hagas los ejercicios, porque puedes aprender mucho de las historias y ejemplos que expondré.
Vive una vida
que te guste
Como consejera, escucho a mucha gente quejarse de que su trabajo los estresa y los liquida espiritualmente y, sin embargo, permanecen en esos trabajos. Algunos se aferran a matrimonios en los que ya no hay amor. Otros siguen atrapados en adicciones que perjudican su salud. Romper hábitos y patrones es muy difícil; es mucho más fácil permanecer en nuestra zona de seguridad. No obstante, si estás dispuesto a trabajar y a mirar en tu interior, recibirás una recompensa. El aburrimiento, la resignación, el estrés y el miedo se transformarán en pasión a medida que tu vida se convierte en una aventura maravillosa.
El crecimiento y los cambios espirituales son tan mágicos como la transición de la oruga a mariposa. Experimentarás una sensación
de renacimiento a medida que la forma de pensar, ser y hacer de antes desaparezcan y emerja un nuevo sentido de ti mismo. Y entonces, al sentirte más feliz y productivo que nunca, serás la versión más poderosa de ti mismo.

ÍNDICE

Cómo tomar la decisión correcta
puede crear una felicidad duradera
Traducción: Mireia Terés Loriente
índice
Introducción. ¿Estás preparado para hacer un cambio?     13
Karma      14
Decisiones kármicas      16
Patrones kármicos     17
La fórmula de los 3 pasos de los patrones kármicos     18
Toma el control de tu tiempo      20
Mi historia      21
Puedes hacer cosas que nunca imaginaste      23
Tu cuaderno kármico     24
Vive una vida que te guste     25
Capítulo uno. Elige el ahora      27
Elegir la vida . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .     .      27
Recoger lo que has sembrado     30
Tus respuestas automáticas (Samskaras)     31
Ejercicio: conoce tus respuestas automáticas      34
Ejercicio: descubre la raíz de tu miedo     36
Ejercicio: mejora tu programa     38
Ejercicio: aprende a calmarte     41
Ejercicio: meditación con respiración      42
Ejercicio: otras formas de calmarte      42
La paciencia es una virtud     43
Capítulo dos. Elige el alivio      45
La causa del sufrimiento (kleishas)      45
1. La ignorancia en tu vida (avidya)     47
2. El ego en tu vida (asmita)     55
Ejercicio: transformar el asmita     56
3. Las ataduras poco sanas en tu vida (raga)     57
Ejercicio: ¿cuánto te enganchas a algo?     59
4. La repulsa en tu vida (dvesha)     62
Ejercicio: volver a subirte al caballo     64
Ejercicio: conoce tus límites     68
5. La muerte en tu vida (abhinivesha)     68
Ejercicio: soltar el abhinivesha     70
Aclarar percepciones distorsionadas (kleishas)     71
Capítulo tres. Elige el crecimiento      73
Elige la confianza     73
La fórmula de los patrones kármicos     76
1. Aclarar: localizar y examinar un patrón kármico     78
Ejercicio: paso 1: aclarar. Identificar las condiciones
no deseadas     83
2. Limpiar: identificar tus lecciones espirituales      85
Ejercicio: paso 2: limpiar. Identificar tus lecciones
espirituales      89
3. Crear: descubrir nuevas acciones     91
Ejercicio: paso 3: crear. Identifica tus nuevas acciones      94
La fórmula de los patrones kármicos en acción      96
Capítulo cuatro. Elige la integridad      97
La importancia de la integridad     97
Ejercicio: lista de la integridad      100
Ejercicio: recuperar la integridad     101
Contratos tácitos     102
Ejercicio: reequilibrar los contratos tácitos con los demás      103
Ejercicio: reequilibrar tu contrato con la Tierra     107
Mantener la integridad (yamas)     109
Ejercicio de redacción: los yamas en tu vida     110
La integridad recuperada     114
Capítulo cinco. Elige la intención     115
El deseo de tu corazón     115
La historia de Michel     116
Vivir la vida con intención      119
Ejercicio: establecer contacto con tu intención      120
Vivir con intención (niyamas)     124
Ejercicio de redacción: Los niyamas en tu vida     125
Ejercicio: descubre tu intención     134
Tener intención     141
Capítulo seis. Elige la claridad      143
La ley de la atracción     143
Uso de la fórmula de las intenciones kármicas     146
1. Deseos: verdadero y falso      147
2. Aclarar qué quieres     148
Ejercicio: tener, ser, hacer      150
3. Fijar una intención mediante un mapa del tesoro     151
4. Establecer un marco temporal      153
Ejercicio: el ritmo kármico      154
5. Actuar      155
6. Determinación     156
7. El precio que pagas     157
Ejercicio: las etiquetas kármicas     159
Ejercicio: trucos para aprender a valorarte     161
Ejercicio: arrogancia      162
Ejercicio: convéncete     162
Resumen de la fórmula de intenciones kármicas      167
Capítulo siete. Elige la acción      169
Tu resistencia     169
Ejercicio: adquirir percepciones     171
La situación perfecta     175
Ejercicio: cómo usar los yamas para cambiar      182
Meditación para alinearse con la voluntad divina     183
Las fuerzas del cambio     187
Ejercicio: puntos de inflexión: descubre tu estilo . . . . . .     .      190
Estar activo     192
Capítulo ocho. Elige el amor      195
La realidad sobre el amor     195
Las relaciones empiezan contigo      197
Ejercicio: establecer contacto contigo mismo     203
Ejercicio: lista para quererte     204
La conversación sobre el amor     209
Ejercicio: el amor en comunicación     213
El amor puesto a prueba     214
Ejercicio: el amor es un gran maestro     221
El amor siempre está presente      226
Epílogo      229
Elige ser completo      229
Lecturas recomendadas     233
Glosario      235
Índice analítico      239
Acerca de la autora      241

Obelisco
9788491110590
Nuevo
Related Products ( 16 other products in the same category )

Nuevo registro de cuenta

¿Ya tienes una cuenta?
Inicia sesión o Restablece la contraseña