Entre mis labios, mi clítoris

Infravalorado, ignorado, confinado a los preliminares del juego sexual, el clítoris es el gran desconocido, un órgano destinado al placer femenino relegado a un segundo plano. Solo así se explica que muchos hombres y mujeres sigan considerando el clítoris una especie de botón e ignoren todavía que se extiende varios centímetros en el interior del cuerpo.
La sexóloga Alexandra Hubin y la periodista Caroline Michel abordan un tema tabú que pone en cuestión muchas de las falsas creencias que aún albergamos sobre el clítoris, el punto G y el eterno dilema entre orgasmo clitoriano y vaginal. Con desparpajo pero también con rigor, las autoras intercalan la historia de este misterioso órgano con sus propias anécdotas y las creencias de una época. Un libro ágil, accesible y ameno, repleto de revelaciones, cuyo verdadero objetivo es ofrecer a las mujeres (y a los hombres) un mayor conocimiento de su placer y de su cuerpo.

Autoras

Caroline Michel

es una brillante escritora y periodista de prensa femenina. Con el paso de los años, se ha especializado en psicología y sexología, y hoy trabaja para los principales medios de Francia. Ha publicado varias obras divulgativas y una novela.

Alexandra Hubin

es doctora en Psicología y sexóloga, fundadora de la sexología positiva, centrada en las claves de una sexualidad satisfactoria. Es autora de numerosas obras sobre el tema y trabaja por la difusión de informaciones fiables a través de los medios, cursos en la universidad, conferencias y publicaciones.

ÍNDICE

Introducción        9
Clitoriana o clitoriana        13

•  Si tienes mayoría de «B»: ¡eres clitoriana I        15
• Penetración
• Penetración for ever       19
• Punto G (coordenadas 26.622833-70.876729)        20
• Un órgano de ida y vuelta        23
• El descubrimiento del clítoris       24
• Querido Freud       27
• El mito del orgasmo vaginal        29
• La llegada del punto G       31
• Todo va mejor (o casi)       32
• El clítoris, una bestia negra de color rosa       37
• JodidapresiÓnn (y no es un juego de palabras)       41
• Lo mejor es enemigo de lo bueno       44

El clítoris: lo que sabemos y lo que decimos sobre él       47

• Mi cuerpo, mi sexo y yo       49
• El clítoris en los colegios       55
• Educar mejor       59
• Entre conejito y clítoris, ¿qué decir a los niños?        61
• Entonces,¿cÓmoo es el clítoris?        65

Las exigencias del clítoris       171

• Cada una con su verdad      
• Decir «sí» al placer       79
• Mucho de esto, mucho de lo otro       79
• Un par de mariposas en el estómago       81
• Encontrar tiempo para el placer       82
• Renunciar al control, ¿un cajón de sastre?       84
• Cuando pensamos demasiado       86
• Conectar con nuestro cuerpo       89
• Te observo y te huelo       90
• Las virtudes del masaje sensual       91
• Cerrar los ojos y       93
• El fontanero y su tubería        95

Las sorprendentes revelaciones del clítoris       99

• Las promesas del clítoris        103
• Las reacciones fisiológicas del clítoris
• a la excitación       104
• Cuando necesitamos una pausa       106
• ¿El tamaño del glande influye en el placer?       107
• El priapismo o el síndrome de la
• erección exagerada       108
• La vagina, vecina íntima del clítoris       109
• El (auténtico) punto G se llama zona C       111
• ¿El tamaño de la vagina importa?        114
• En busca del placer vaginal       117
• ¿Quién habla aún de orgasmo vaginal?       120

Encuentro íntimo con el clítoris        123

• Caricias para complacer al clítoris        125
• *El placer en tu mano       126
• *La lengua en todos sus estados       129
• *Mango de ducha y patito de goma        131
• *Con el pene o con un pepino       134
• *Tocar la partitura con todo el cuerpo       139
• Presentar el clítoris a nuestra pareja       141
• Secretos de la comunicación sexual       143
• *Cuando los cuerpos encuentran las palabras       146
• *El lenguaje erótico       147
• ¿Y la simulación?        148
• *Explorar el clítoris en pareja y con tranquilidad         151

Conclusión       153
Bibliografía        155
Las autoras        158

Introducción

Una de nosotras es sexóloga y la otra, periodista. Usamos la palabra «clítoris» varias veces al día —en la consulta, en los ar­tículos y también en la cama—, pero nunca la habíamos pro­nunciado tanto como en estos últimos meses (ni nuestra editora tampoco). Tras mucho tiempo desterrado del panorama de la sexualidad, este órgano sexual femenino conoce hoy un regreso triunfal.
Admitir que un Órgano existe únicamente para proporcionar placer a la mujer (hasta ahora no se le conocen otras funciones) es una proeza en un mundo donde la sexualidad se ha definido durante mucho tiempo por la penetración y por la satisfacción del hombre. Si los varones tuvieran clítoris, hace lustros que este órgano se habría medido y estudiado. Habría concursos, dibujos en las paredes de los institutos, tentadores mensajes de correo basura con técnicas para agrandarlo y pastillas mágicas para po­nerlo duro en caso de impotencia.
Ha llegado el momento de conocer este órgano que se encuen­tra en el centro del placer femenino. Aunque aún se le conside­ra un simple grano rosa, el clítoris es mucho más que eso. Es asombroso, creativo, ingenioso, sorprendente, y se prolonga
varios centímetros en el interior del cuerpo. Hay infinidad de adjetivos que pugnaban por salir de nuestra pluma cuando es­cribíamos este libro. Aunque estos últimos años hemos ido co­nociendo los descubrimientos científicos a medida que se publi­caban, tenemos la sensación de haber accedido a los secretos del clítoris durante nuestra propia investigación.
¿Para qué escribir un libro sobre el clítoris si no es para que salga de su escondite y nos haga revelaciones sorprendentes? Nuestra finalidad no solo es centrarnos en este órgano y determinar cuál es su mejor perfil, sino invitar a cada lectora a recorrer estas páginas en busca de su «yo sexual».
La publicación de recientes investigaciones relativas a la anato­mía del clítoris proporcionan a las mujeres un mayor conoci­miento de su cuerpo y un mejor acceso al placer. También per­mite acabar con un montón de ideas preconcebidas que rigen la sexualidad, como que el acto sexual está integrado por unos entrantes (los preliminares), un plato principal (la penetración) y un postre (el orgasmo); que unas posturas son mejores que otras; que unas mujeres son de orgasmo vaginal y otras, clitoria­no; que el punto G existe (bueno, quizás no); que la única clave para disfrutar sería relajarse; o que el orgasmo depende del buen hacer de la pareja... Todas estas creencias (la lista podría medir siete clítoris), que suelen transmitirse como un manual de instrucciones, son opresivas. Imponen una norma y nos dictan siempre lo que se supone que debemos hacer, pensar y, sobre todo, sentir.
Ha llegado el momento de entender que no existe ninguna regla ni ninguna manera de «hacerlo bien»: en materia de sexualidad, cada mujer tiene sus propias singularidades y preferencias. Pre­ferencias que cambian con el tiempo, la edad, las parejas, el deseo de ser madre, la anticoncepción, la intensidad de la luz, la música de fondo... Preferencias que cambian según el día de la semana. Lo que nos enseña el clítoris es que el placer es un todo y que, dentro de ese «todo» —inmenso campo de posibilida­des—, las mujeres hacen y deshacen su puzle a su antojo, solas, en pareja o en comuna.
Hemos evitado a propósito que este libro fuera como un receta­rio de cocina, porque el clítoris —y la sexualidad femenina en general— no tiene nada que ver con la pasta a la carbonara o ni con un pudín de semillas de chía que hacemos para impresionar a nuestra suegra. Este libro es una historia, un cuento, un diálo­go, un dormitorio donde dejamos aparcados nuestros comple­jos. También es un intercambio de confidencias y revelaciones sobre nosotras, la ciencia y el periodismo. Nace del deseo de divulgar la belleza del clítoris y todo lo que tiene que enseñarnos sobre su funcionamiento y su potencial, su precioso glande y el placer sexual femenino.
En esta obra compartimos el resultado de nuestra investigación y nuestros pensamientos más íntimos. Esperamos que mires tu sexo con nuevos ojos, porque las últimas revelaciones sobre clí­toris dan, sencillamente, ganas de reinventarse.