El Mensaje Curativo Del Alma
Referencia: 9788499171531
La enfermedad como mensaje del alma.
Junto a detallados análisis de las más diversas enfermedades y su significado para el afectado, Dahlke se ocupa muy detalladamente de cómo tratar cada una de ellas. Así, el médico y psicoterapeuta describe en este libro una gran cantidad de cuadros patológicos concretos con el objetivo de ayudar al lector a leer e interpretar sus propios síntomas y establecer con posterioridad la relación con las causas espirituales de la enfermedad. Se trata de un libro irreemplazable, muy adecuado como obra de consulta y para el estudio profundo de la interrelación entre cuerpo y alma.
* Cómo interpretar los síntomas de numerosos trastornos de la salud.
* Un estudio del cáncer desde sus vertientes fisiológica, cultural y social.
* Los cuadros neurológicos más comunes, como la enfermedad de Parkinson, la esclerosis múltiple o la epilepsia.
* los problemas glandulares como el hiper y el hipotiroidismo.
* Las afecciones relacionadas con la columna vertebral, los vicios posturales, las escoliosis y las lesiones espinales.
* Las enfermedades leves de la piel como los hongos o las verrugas.
* Los problemas y afecciones más comunes que afectan a la tercera edad.
«Un verdadero filón para los que buscan las causas de su enfermedad. Si se quiere investigar
el cómo y el porqué de cada dolencia, este libro es de obligada lectura.»
DR. ULRIKE GOTTWALD, Esotera
Una interpretación de los síntomas que permite ponerlos en relación con las causas espirituales de la enfermedad y que deben ser entendidos como mensajes de atención que nos envía nuestro espíritu cuando se rompe el equilibrio cuerpo-mente.
Cuando hace unos diez años el médico y psicoterapeuta Ruediger Dahlke y el psicólogo Thorwald Dethlefsen publicaron La enfermedad como camino, suscitó un enorme interés entre el gran público y algo más tarde entre la propia clase médica, y fue durante varios años una de las obras de divulgación más vendidas tanto en Alemania como en los restantes países donde fue publicada.
El enfoque de Dahlke se distingue básicamente de la medicina convencional porque considera positivas las manifestaciones de la enfermedad: «Los síntomas —dice— son una extraordinaria oportunidad de crecimiento. En lugar de unirnos al paciente para luchar contra los síntomas, debemos unirnos a los síntomas para reconocer qué falla en el paciente». Adoptando una opción provocadora pero profundamente consecuente, el autor se pregunta hasta cuándo continua-remos buscando únicamente los síntomas sin tomarnos la molestia de «reconocerlos como indica-dores, y seguirlos». La conclusión de Dahlke es que la evolución de la enfermedad depende exclusiva-mente del propio paciente.
En esta obra, continuación y ampliación de la primera, el autor aborda en concreto diferentes cuadros patológicos como la esclerosis múltiple, la epilepsia, el mal de Parkinson, la enfermedad de Alzheirner, los trastornos de tiroides, los problemas de columna y otras enfermedades articulares, los herpes, las afecciones de la próstata y algunos otros aparentemente tan banales como la alopecia, los hongos o las verrugas. Abordando cuestiones más generales, pero de profunda importancia para la sociedad actual, lleva a cabo un minucioso análisis de la problemática relacionada con la tercera edad y, además, una parte muy considerable del libro aborda la temática del cáncer, analizando en profundidad tanto la estructura de la personalidad como los conflictos anímicos de los afectados, haciendo especial hincapié en su expresión más frecuente en la mujer: el cáncer de mama.
• Comprender cómo se deben interpretar los cuadros patológicos.
• Interpretar adecuadamente los síntomas más manifiestos de la enfermedad.
• Adoptar y aprovechar los aspectos más beneficiosos de la homeopatía.
• Comprender los ritos sociales de la medicina moderna.
• Analizar el vocabulario específico y los mitos que se establecen alrededor de la enfermedad.
Para Ruediger Dahlke lo que el enfermo hace de su enfermedad depende exclusivamente de él mismo. Para iniciar el proceso curativo es fundamental aprender a leer el mensaje que nos transmite la sintomatología. En estas condiciones la patología puede iniciar una vía de un desarrollo espiritual inédito.
Introducción
Diez anos después de la publicación del libro La enfermedad como camino, ha llegado el momento de continuar y ampliar los temas descritos en él. El hecho de que las tesis del primer libro fueran acogidas con tanto interés, en un principio por personas interesadas y después, paulatina-mente y de forma creciente, en círculos médicos demuestra la necesidad de encontrar una explicación a la enfermedad que reúna la forma y el contenido, el cuerpo y el alma.
Algunos pacientes, personas asistentes a seminarios y lectores me han expresa-do su deseo de profundizar más en las interpretaciones, especialmente de aquellas enfermedades que no fueron tratadas en el primer libro. Aquí las encontrarán de forma ampliada. Atendiendo múltiples sugerencias no nos hemos preocupado tanto de exponer gran cantidad de cuadros clínicos como de hacerlo de manera que los afectados se den cuenta de la dirección en la que han de seguir trabajando.
Una de las consecuencias que podemos extraer del primer libro es la necesidad de poner de mayor relieve los pasos que llevan a una determinada interpretación, así como ahondar en el «pensamiento vertical», que es la base sobre la que se construye todo el concepto. En las consultas hemos comprobado que es más útil aproximarnos a un determinado cuadro clínico desde diversos puntos de vista que centrarnos en sus aspectos más sobresalientes. Aunque el hecho de interpretar gran número de síntomas de una misma enfermedad pueda parecer tedioso a los no afectados por la misma, creemos que de esta manera los enfermos podrán seguir trabajando de manera más consecuente y provechosa. Precisamente ésta es la
idea que ha impulsado el lanzamiento de la colección de libros de bolsillo Heilen (Sanar), que exponen de manera exhaustiva grandes complejos temáticos, como por ejemplo problemas de corazón y de circulación, problemas digestivos y problemas de peso. De este modo el enfermo puede profundizar en la comprensión del propio cuadro clínico así como aprender a interpretar. En el índice analítico al final de este libro se incluyen dichos complejos así como los cuadros patológicos tratados en el primer libro. El propósito de elaborar este registro ha sido reunir en un mismo lugar todas las interpretaciones existentes sobre una determinada enfermedad.
A fin de poder explicar con mayor claridad el entorno de cada uno de los cuadros patológicos, se ha preferido renunciar a la articulación funcional clásica y aplicar un esquema cabeza-pies. La única excepción la constituyen los temas cáncer y problemas de la tercera edad, colocados respectivamente al principio y al final de este libro. Ello nos permite introducir la explicación de los cuadros clínicos no tan sólo en la simbología del órgano afectado, sino también en la de la región en la que está localizado.
Mediante el trabajo práctico psicoterapéutico con este concepto hemos decidido ampliar algunos puntos y corregir otros. Así, por ejemplo, en el primer libro algunas de las proposiciones resolutivas abandonaban el principio homeopático. De este modo, se recomendaba a las personas con la tensión baja que plantaran cara y que demostraran su fuerza. En realidad en este caso se trata básicamente de so-meterse a la misión directa del síntoma, es decir aceptar las propias debilidades y aprender a practicar la entrega y la humildad. Lógicamente el camino hacia el polo opuesto sólo puede ser la consecuencia del cumplimiento de la misión directa. La entrega y la humildad devienen con el tiempo fuerza, aunque ésta no es la finalidad principal. A fin de exponer con mayor claridad esta idea hemos dedicado a la homeopatía un epígrafe propio. Junto al concepto básico de que «la enfermedad nos hace sinceros», en este libro se ha tenido en cuenta en todo momento el carácter redentor de la enfermedad siguiendo el principio «la enfermedad nos impone una misión». Las preguntas que se formulan al final de cada capítulo remiten tanto al área redimida como al área no redimida.
El capítulo Introducción a la filosofía de la interpretación de los cuadros patológicos no es más que un resumen de los presupuestos teóricos. Hemos puesto especial énfasis en aquellos puntos que, a juzgar por nuestra experiencia, suelen dar pie a equívocos. Por lo demás, se presupone que el lector esta familiarizado con los temas generales de La enfermedad como camino, por lo que hemos intentado no repetirnos. El capítulo introductorio de este nuevo libro está en gran parte inspira-do en las reacciones que despertó el primero. Algunos temas fundamentales como «polaridad y unidad», «bueno y malo» y «sombras» sólo se tocan de pasada, a fin de disponer de espacio suficiente para tratar conceptos más profundos, como los campos de evolución y los rituales.
Asimismo, tampoco insistiremos en los grandes complejos temáticos dedicados
al corazón, los riñones y el hígado, que o bien ya se trataron en el primer libro o en los libros de bolsillo Heilen. En lugar de ello, al final de este libro se indica dónde encontrar la información oportuna. Los asteriscos (*) indican que en otro pasaje del libro se describe más exhaustivamente un determinado cuadro clínico, que puede localizarse en las páginas indicadas en el registro.
Por otra parte, teniendo en cuenta el tipo de cáncer que más afecta a la población femenina: el de mama,* hemos creído conveniente retomar el tema del cáncer y ampliarlo considerablemente. En el primer libro el capítulo acerca del cáncer estaba situado al final y sus conclusiones han resultado confusas para muchos y muchas pacientes, ya que ponía demasiado énfasis en el segundo paso de aprendizaje, el amor, pero descuidaba el primer paso, que es la necesaria lucha.
Finalmente, sólo me queda lamentar que Thorwald Dethlefsen, que tanto in-fluyó en este concepto, se haya retirado definitivamente, por lo que ha resultado imposible persuadirle para que colaborara en esta segunda parte.
Indice
INTRODUCCIÓN 11
PRIMERA PARTE
1. INTRODUCCIÓN A LA FILOSOFÍA DE LA INTERPRETACIÓN DE LOS CUADROS PATOLÓGICOS 17
1. Interpretación y valoración 17
2. Ceguera propia y proyección 19
3. Revalorización de los síntomas 20
4. Desplazamiento de los síntomas en dos sentidos 21
5. Forma y contenido 23
6. La homeopatía 26
7. El juego de las causas 28
8. Analogía y simbolismo 30
9. Campos formativos 32
II. ENFERMEDAD Y RITUAL 35
1. Rituales en nuestra sociedad 35
2. Rituales de paso 37
3. Rituales de la medicina moderna 38
4. Rituales de la medicina antigua 44
5. Enfermedad y pautas 45
6. Pensamiento vertical y principios elementales 47
7. La enfermedad como ritual 52
III. ORIENTACIONES PRÁCTICAS PARA EL TRABAJO CON CUADROS PATOLÓGICOS 54
1. La riqueza de nuestro vocabulario 54
2. Los mitos y los cuentos 55
3. El camino del conocimiento a través del polo opuesto 56
IV RECAPITULACIÓN 58
1. Puntos de partida 58
2. Normas generales y cuestiones fundamentales 59
3. La enfermedad como oportunidad 60
SEGUNDA PARTE
1. ESQUEMA CABEZA-PIES 63
II. EL CÁNCER 68
1. El cuadro canceroso en nuestra época 68
2. El cáncer a nivel de la célula 69
3. El origen del cáncer 72
4. Planos de significación del proceso canceroso 73
5. Fases de desarrollo de la enfermedad 73
6. Regresión y religión 77
7. El cáncer como caricatura de nuestra realidad 78
8. Cáncer y defensas 79
9. El «cáncer» en el plano social 82
10. Solución del cáncer y su redención 86
11. Posibles terapias 90
III. LA CABEZA 94
1. El cabello 94
Hirsutismo 99
Pérdida del vello 100
Alopecia 101
2. El rostro 1 03
El rubor 1 05
La neuralgia trigémina y otros dolores faciales
de origen nervioso 106
Paresia facial o parálisis de los nervios faciales 109
Erisipela facial 114
Herpes labial 117
La visión y los ojos 121
La audición y los oídos 126
Tinnitus y otros trastornos auditivos 128
El órgano del equilibrio y la estabilidad 131
Los vértigos 131
El mal de Méniére 133
La nariz y el olfato 135
Inflamación de los senos nasales accesorios o sinusitis 139
Los pólipos 1 42
Malformaciones del tabique nasal 143
Rinofima y nariz en tubérculo y de bebedor 144
Rotura del hueso nasal 147
El sentido del gusto 1 48
IV. EL SISTEMA NERVIOSO 150
1. Del nerviosismo al colapso nervioso 151
2. Conmoción cerebral 155
3. Meningitis 156
4. Cuadros neurológicos 162
La enfermedad de Parkinson o parálisis agitante 163
Corea de Huntington o baile de San Vito 170
Ataque de apoplejía 173
Esclerosis múltiple 177
Epilepsia 186
V. EL CUELLO 194
1. La garganta 197
La voz, barómetro del estado de ánimo 197
El carraspeo como síntoma 201
2. La glándula tiroides 202
El bocio 203
El hipertiroidismo 206
El hipotiroidismo 212