Manual Practico De Shiatsu Zen

Referencia: 9788487403781
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Shiatsu Zen es el refinamiento del arte manual desarrollado por el Maestro Shitzuto Masunaga. Una técnica, un estilo, un sistema de tratamiento con bases en la medicina china clásica y los sistemas de salud tradicionales japoneses.
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Shiatsu Zen es el refinamiento del arte manual desarrollado por el Maestro Shitzuto Masunaga. Una técnica, un estilo, un sistema de tratamiento con bases en la medicina china clásica y los sistemas de salud tradicionales japoneses. El Shiatsu Zen trabaja corporalmente a través de los meridianos o canales por donde circula y se manifiesta preferentemente el Ki, o energía biológica, presente en todo ser vivo.
El Shiatsu pretende entrar en contacto con ella, a través de la escucha corporal y acompañarla en su viaje a través del cuerpo. Así, la correcta posición del practicante, su motivación y su saber estar en el aquí y ahora facilita todo este trabajo de acompañamiento y dirección del Ki.
Este manual gráfico, es una muestra práctica de las diferentes posiciones y recorridos de los meridianos del Shiatsu Zen. Base imprescindible para poder obtener todo el beneficio que esta ancestral y viva técnica terapéutica posee.

Prólogo

Hace unos años estaba impartiendo enseñanzas en mis habituales clases en una escuela de Shiatsu en Barcelona. En dicha clase apare-ció un nuevo rostro, alguien que no me era familiar. Su atención y el deseo de aprender Shiatsu me impresionaron mucho. Se trataba de una nueva instructora de la escuela, iba vestida de blanco y se había graduado recientemente en el Ohashi Institute de Nueva York.
Este nuevo rostro en el mundo del Shiatsu en España era Imma Bonet. Los siguientes años esperaba con placer nuestros encuentros anuales. En una extraordinaria demostración de creatividad, Imma, de forma independiente, descubrió los rasgos principales de los últimos desarrollos del arte y de la ciencia del Shiatsu. Estoy convencido de que mediante su determinación y su dedicado trabajo Imma se ha situado claramente como una de las practicantes y maestras de Shiatsu más notables de Europa.
Tuve la suerte de ser aprendiz en el linaje de maestros que van desde Shitzuto Masunaga, el maestro más influyente de nuestra época, hasta mi maestra Pauline Sasaki. Me siento muy honrado por haber sido el centro de la mayoría de los desarrollos del Shiatsu en las dos últimas décadas, y me produce una gran esperanza sobre el futuro del Shiatsu el ver libros como éste popularizado por Imma.
Si te acercas por primera vez al Shiatsu te recomiendo apasionadamente este manual. No hay en España nadie mejor cualificado que Imma para introducirte en el mundo del Shiatsu. En los últimos veinte años, el Shiatsu ha pasado de ser una terapia japonesa poco conocida, a convertirse en una de las terapias corporales basadas en la energía más populares del mundo. Vosotros también podéis ser parte de este desarrollo.
Aprender Shiatsu constituye un viaje emocionante y gratificante. Es uno de los tratamientos más eficaces para una amplia gama de problemas de salud. Pero tal vez sea de mayor importancia el que constituya una vía profunda de autodescubrimiento, tanto para el que da como para el que recibe; permitiéndonos el acceso a algunas de las antiguas verdades más básicas sobre el ser humano.
El Shiatsu se ha vuelto cada vez más necesario en el marco de una cultura cada vez más rápida y materialista. No es extraño que se haya hecho tan popular en Occidente. Os deseo lo mejor en vuestro propio viaje con el Shiatsu, cuyo primer paso puede ser comprar este magnífico libro.

CLIFFORD ANDREWS
Maestro Shiatsu, co-fundador del Shiatsu College UK
y director del Programa de enseñanza a post-graduados
del Shiatsu College.

Introducción


El shiatsu es una terapia manual procedente del Japón. Sus principios provienen de la Medicina Tradicional China, pero fueron los japoneses quienes recogieron toda esta información generada por la práctica de los maestros chinos y la transformaron en una de los artes más refinadas de la terapia manual. Shi quiere decir «dedo» y atsu «presión», de aquí que la definición de shiatsu más común sea «presión con el dedo». En el tratamiento de shiatsu se aplican presiones con los dedos, palmas de las manos, codos y rodillas; también se realizan balanceos, estiramientos y amasamientos, en diferentes secciones del cuerpo, con el propósito de corregir desequilibrios del organismo, mantener y promover la salud y el bienestar del receptor. Esta terapia fue reconocida por vez primera por las leyes japonesas en 1955. El shiatsu fue creado por Namikoshi en 1912. Este maestro creó la primera escuela de shiatsu en 1940 y en 1963 el ministerio de salud japonés reconoce el shiatsu como un método terapéutico. La línea desarrollada por Namikoshi no tuvo mucha relación con la medicina tradicional japonesa, todo lo contrario, creó una terapia muy occidentalizada: disecciona el cuerpo y aplica los mismos conceptos de la patología, anatomía y fisiología occidentales; da más importancia a las zonas donde aparece el dolor o disfunción y las trata con puntos de la medicina tradicional china.
Aparte de Namikoshi, quien ha tenido mucha importancia en el mundo de shiatsu ha sido Shizuto Masunaga, el fundador del Shiatsu Zen. Profesor de la facultad de Psicología en la universidad de Tokio, Masunaga estaba muy interesado en la medicina tradicional de oriente e investigó estudiando textos antiguos chinos. Masunaga fue discípulo de Namikoshi y ejerció como profesor en su escuela durante diez años, hasta que llegó a la conclusión de que era necesario unir sus conocimientos de shiatsu con los de la psicología. Combina la práctica del shiatsu con investigaciones históricas de sus raíces y la filosofía oriental. El resultado: el Shiatsu Zen, disciplina que se basa en el uso de los meridianos energéticos como una unidad. Es un enfoque más holístico y sensitivo, que tiene como finalidad la armonización del ki (energía vital) en su recorrido por el cuerpo humano.
Extiende los meridianos tradicionales de la medicina tradicional china por todo el cuerpo, hasta el punto de poder tratar casi todos los órganos y vísceras en cualquier zona del cuerpo. A partir de los métodos tradicionales de palpación del hara y la espalda, crea un método de valoración del estado de la energía: su enfoque era tratar el meridiano como una unidad prescindiendo de los puntos de la medicina tradicional china para darle un concepto más global.
Para trabajar con el estado de la valoración de la energía, desarrolla los conceptos kyo (deficiencia) y jitsu (exceso). Dos valoraciones con una proximidad a los conceptos de yin y yang respectiva-mente pero con una matización de contenido. Kyo y jitsu expresan una forma particular de manifestación de la vida. En el kyo encontramos lentitud, poca respuesta, déficit de expresión, mientras que jitsu presenta una respuesta más rápida, una plenitud. Con kyo y jitsu podemos valorar el estado de un tejido, de un meridiano, de una función, incluso de una forma general de ser.
Masunaga, respetando los conceptos de la medicina oriental, presta más atención al paciente o receptor que al tratamiento en sí, para de este modo poder conocer su estado físico, emocional, psicológico y espiritual. Lo cual va mucho más allá del conocimiento del cuerpo humano desde un punto meramente anatómico. Entra así en el concepto de la energía biológica o ki y cómo se mueve ésta a diferentes niveles.
A la hora de poner en marcha todo este trabajo de Shiatsu Zen, es necesario tener en cuenta los diferentes estados del receptor: físico, mental, emocional y espiritual. Y, sobre todo, son muy importantes las posiciones de trabajo del practicante, el enfoque y la posición de las manos. De aquí también nació el concepto de la mano madre (mano pasiva que escucha) y la mano hija (mano activa que realiza el trabajo de las presiones).
Para el Shiatsu Zen, el diagnóstico del hara (zona abdominal, «el jardín precioso donde se revela la esencia pura del estado del ki aquí y ahora») es uno de los métodos más utilizados en Japón como método de diagnóstico a través de la palpación; no sólo lo emplean los practicantes de shiatsu, también los acupuntores, con la finalidad de completar su diagnóstico con el pulso. En el hara se refleja el esta-do de los órganos y vísceras, necesario para conocer los meridianos que se trabajarán, y siguiendo el concepto del Shiatsu Zen se escoge el más kyo (deficiencia) y el más jitsu (exceso) para encontrar un patrón a equilibrar. A partir de esta valoración, la idea de trabajo
consiste en dar más apoyo y tiempo de presión sobre los meridianos kyo y más dinamismo y movimiento a los meridianos jitsu. Consiguiendo así que el ki que circula por ellos se regularice y tienda al equilibrio.
El estilo que desarrolló Masunaga ha tenido una gran evolución gracias al excelente trabajo de su discípula y maestra de hara Pauline Sasaki, y posteriormente con las aportaciones de uno de los alumnos más brillantes de Sasaki, el británico Cliff Andrews, actualmente uno de los profesores de shiatsu más reconocidos mundialmente. Andrews ha creado una extensa biblioteca sobre el hara y gracias a las sólidas bases que Masunaga desarrolló, aprendió a sentir los diferentes estados vibracionales del ki, expresados en el hara a través del kyo y jitsu.
En relación al kyo y jitsu, el Shiatsu Zen se ciñe al estado inmediato, se centra en la distribución de la energía por los meridianos. El kyo y el jitsu no sólo están en el hara, sino que se manifiestan por todo el cuerpo. También hay muchos estudios del kyo y jitsu que explican formas de relacionarse entre sí. Gracias a la flexibilidad del Shiatsu Zen y al camino tan claro marcado por Masunaga, Sasaki y Andrews que han realizado importantes investigaciones, podríamos extendernos mucho sobre ello, pero no forma parte del objetivo de este manual práctico.
La técnica de la mano madre e hija es un tipo de comunicación que nos permite conectar con el ki y el estado del kyo/jitsu. Sin esta comunicación sólo se percibe el estado físico del meridiano; Masunaga lo menciona como uno de los puntos importantes para la práctica del Shiatsu Zen. Si no hay un uso consciente de las manos, el shiatsu no se considera dentro de la línea zen, porque se hace difícil poder captar el estado sutil y energético del ki. La mano madre asume un papel yin, de escucha. Se abre a lo que el cuerpo quiera expresarle. Estando en todo momento sensible y receptiva para poder atender a las necesidades tanto del tejido, como del meridiano. La mano hija, la Yang, tiene un papel más activo. Es la mano que va a efectuar las presiones, teniendo un papel más penetrante e incisivo.
Masunaga describe de forma conceptual los diferentes estados del ki, a partir de las funciones de los meridianos perfilados en el ciclo vital de la ameba, como veremos más adelante. El diagnóstico del ki se ciñe al estado presente, el aquí y ahora característico del zen, y da su importancia a la distribución de los meridianos tal como se perciben en la palpación del diagnóstico del hara. Masunaga desapareció sin
poder llevar más allá el concepto del kyo y jitsu. Pero maestros como Pauline Sasaki y Cliff Andrews han elaborado una extensa biblioteca sobre la materia tras muchos años de investigaciones.
Kyo y jitsu son fenómenos que acompañan el estado del ki, no siempre son sinónimo de enfermedad, sino que acostumbran a relacionarse con un estado de ánimo que puede durar una hora, un mes, o ser algo más crónico, que proviene de la infancia. El diagnóstico del kyo y jitsu siempre se basa en los movimientos energéticos y síntomas físicos.
A través de la expresión del ki, Masunaga fue capaz de extender los meridianos clásicos por todo el cuerpo. Sin embargo, después de muchos años, los puristas aún dudan de la autenticidad de este des-cubrimiento. El método del Shiatsu Zen está enfocado en las extensiones de los meridianos y su localización es relevante por su peso específico sobre el cuerpo, la mente y las emociones. También deduce que si el sistema de meridianos es algo que se puede sentir viva-mente, también las posiciones del cuerpo y el enfoque de éste son importantes, facilitando el movimiento del ki y pudiendo sentir la energía de una forma más adecuada. Partiendo de esta idea toma como referencia la secuencia conocida en oriente como el reloj chino o cronobiología energética. Al seguir esta secuencia se pueden trazar los meridianos por todo el cuerpo sin interrupción.
La simetría de los meridianos por el cuerpo se va alternando entre sí, entre el yin y yang. El resultado de esta simetría siempre está vinculado con las horas sucesivas del día, de las cuales los meridianos se muestran más activos. Masunaga parte de esta secuencia, pero no para referirse a un día sino al curso de la vida o los ciclos que ésta conlleva. Explicado de forma sencilla: aplica los ciclos de la ameba, unos de los seres unicelulares más simples conocidos, y crea lo que se conoce como «el ciclo energético de la ameba». Este modelo, que parte de la propia identidad energética, lo desarrolla en seis ciclos que aplica al cuerpo humano:

•    El primero es el establecimiento de una frontera e inicio del intercambio: son los meridianos de Pulmón e Intestino Grueso y representan las funciones de tomar y eliminar, estando en la misma frontera del cuerpo.
•    El segundo ciclo es la satisfacción de las necesidades. Aquí tendríamos el estado de nutrición dado por el Bazo y el Estómago, el apetito y la satisfacción.
•    El tercer ciclo es el de la asimilación del alimento, interpreta-do por los meridianos de Intestino Delgado y Corazón.
•    El cuarto estado es huir del peligro, aquí entraría la función de los meridianos de la Vejiga y el Riñón.
•    El quinto ciclo es la circulación y protección, en donde entra la función de los meridianos de Maestro Corazón y Triple Calentador.
•    El sexto y último estado es tomar una dirección, aquí entrarían las funciones de los meridianos vesícula biliar e hígado.
A este esquema, añade su idea de que en el universo lo micro está en lo macro y lo macro en lo micro.
Sobre si hay zonas del cuerpo donde los meridianos se expresan con mucha fuerza, Masunaga cree que hay regiones donde puede encontrar esta vibración parecida, aunque sea con menos intensidad. Son las extensiones de meridianos. Su idea es seguir una línea de trabajo más intuitivo, más sensible que la de Namikoshi. El creador del Shiatsu Zen traza los meridianos, pero no da referencias anatómicas especificas: su método era más de palpación siguiendo la vibración. Este aprendizaje fue pasando de generación en generación, los alumnos aprenden y retienen la extensión de los meridianos. Para que su sistema fuera más claro y fácil de asimilar de forma visual, elabora un dibujo donde se muestran las extensiones. Los alumnos también deben estudiar sus teorías para entender el concepto de estos.
Toda obra tiene un objetivo. Se calcula que en España existen alrededor de 3.000 practicantes de Shiatsu Zen, colectivo que supera con creces al resto de estilos de shiatsu. La falta de materiales que traten las extensiones de los meridianos de Masunaga con las referencias anatómicas hace que muchos alumnos y terapeutas se olviden de éstas y practiquen el Shiatsu Zen con los meridianos tradicionales. Este manual práctico pretende llenar ese vacío. Y lo hemos intentando hacer con todo cariño y respeto, poniendo el máximo de nuestros conocimientos en una forma comprensible y escueta. Esta guía está recomen-dada a todo practicante, iniciado o estudiante de shiatsu, esperando que no se pierdan las bases y raíces del gran Maestro Masunaga.
Dentro de la enseñanza tradicional del shiatsu, era un hecho común el permitir al alumno mirar detenidamente como el maestro aplicaba la técnica sobre los pacientes. Así, y después de mucho tiempo de simple observación, se le permitía al alumno acercarse también al paciente y aplicar alguna de las técnicas aprendidas a través del con-tacto meramente visual.
¿Qué es lo que debía de ver el alumno?, ¿Por qué solamente se le permitía mirar durante un largo período antes de establecer contacto táctil con la persona?
En la concepción terapéutica del shiatsu, tenemos dos cuerpos que se ponen en contacto: el cuerpo del receptor y el cuerpo del dador. Y es a través de este contacto que se realiza todo el trabajo. Y es ahí, en el con-tacto, donde reside el secreto de la técnica. Es a través del refinamiento de la posición, del toque y de las diferentes manipulaciones, que se crea el espacio para que se realice la comunicación. Siendo la comunicación igual a movimiento. Un movimiento, un mecanismo de cambio desde el estado mórbido hacia la salud, del aislamiento a la abertura.
En el sistema de salud tradicional japonés, se prejuzga que el ser humano permanece sano mientras tiene un contacto armonioso con el mundo natural y sus diversas manifestaciones: el sol, el aire, las estaciones, los seres vivos... Si el contacto se rompe, se distorsiona o se desarmoniza, la enfermedad hace aparición en alguno o varios de los tres planos del ser humano: físico, mental y emocional.
Así, el contacto que establece el terapeuta de shiatsu con el paciente, tiene como objetivo, servir de catalizador para que la persona pueda de nuevo armonizar su comunicación con el medio. Armonizarla, restaurarla o simplemente mantenerla en activo.
El practicante de shiatsu tiene su cuerpo como herramienta de trabajo. De ahí que optimice todos sus movimientos, sus giros, sus presiones, sus balanceos. Y al igual que un poeta refina el lenguaje habla-do para crear bellas expresiones, el practicante de shiatsu refina el len-guaje corporal para crear verdaderas poesías.
¿Qué es lo que debería de ver el alumno?
Quedarse en la mera percepción de la técnica realizada es como leer un poema sin prestar atención a la rima o a su sonoridad métrica.
La visión tiene que refinarse hasta el punto de ver detrás de cada movimiento, detrás de cada posición del practicante de shiatsu, la más pura expresión de la vida.
Y aunque en un libro hay dificultad para que la vida se exprese, al menos sirve como soporte para que quien la busque, la encuentre.

Índice


Prólogo     vii
Introducción     ix
    ELEMENTO AGUA: RIÑÓN • VEJIGA
Riñón     3
Riñón en pecho     4
Riñón en brazos     5
Riñón en cuello     6
Riñón en nalgas-sacro     7
Riñón en piernas     8
Riñón en piernas en decúbito lateral     9
Vejiga     11
Vejiga en brazos     12
Vejiga en cuello-cabeza     13
Vejiga en espalda     14
Vegija en espalda en decúbito lateral     15
Vejiga en sacro     16
Vejiga en piernas     17
ELEMENTO MADERA: HÍGADO • VESÍCULA BILIAR
Hígado     21
Hígado en pecho     22
Hígado en brazos     23
Hígado en cuello     24
Hígado en piernas     25
Vesícula Biliar     27
Vesícula Biliar en cuello-cabeza     28
Vesícula Biliar en brazos     29
Vesícula Biliar en escápula en decúbito lateral     30
Vesícula Biliar en cadera-pierna     31
Vesícula Biliar en cadera en decúbito lateral     32
Vesícula Biliar en cadera en prono     33
ELEMENTO FUEGO: CORAZÓN • INTESTINO DELGADO • MAESTRO CORAZÓN •TRIPLE CALENTADOR
Corazón     37
Corazón en pecho     38
Corazón en brazos     39
Corazón en cuello     40
Corazón en piernas     41
Corazón en piernas de supino     42
Intestino Delgado     43
Intestino Delgado en brazos     44
Intestino Delgado en cuello     45
Intestino Delgado en escápula     46
Intestino Delgado en nalgas     47
Intestino Delgado en piernas     48
Maestro Corazón     49
Maestro Corazón en pecho     50
Maestro Corazón en brazos     51
Maestro Corazón en cuello     52
Maestro Corazón en piernas     53
Maestro Corazón en nalgas     54
Triple Calentador     55
Triple Calentador en brazos     56
Triple Calentador en brazos en decúbito lateral     57
Triple Calentador en cuello     58
Triple Calentador en espalda-escápula     59
Triple Calentador piernas     60
Triple Calentador en piernas en decúbito lateral     61
ELEMENTO TIERRA: BAZO • ESTÓMAGO
Bazo     65
Bazo en pecho     66
Bazo en brazos     67
Bazo en cuello     68
Bazo en piernas     69
Estómago     71
Estómago en pecho     72
Estómago en brazos     73
Estómago en cuello-cara     74
Estómago en piernas     75
ELEMENTO METAL: PULMÓN • ÍNTESTINO GRUESO
Pulmón     79
Pulmón en pecho     80
Pulmón en brazos     81
Pulmón en cuello     82
Pulmón en piernas     83
Intestino Grueso     85
Intestino Grueso en torso     86
Intestino Grueso en brazos     87
Intestino Grueso en cuello-cara     88
Intestino Grueso en nalgas     89
Intestino Grueso en piernas     90
Intestino Grueso en piernas en decúbito lateral     91
Intestino Grueso en piernas en prono     92
Estiramientos de meridianos
Estiramientos de los meridianos de Masunaga     95
Estiramiento de Pulmón en brazos     97
Estiramiento de Bazo en brazos     98
Estiramiento de Maestro Corazón en brazos     99
Estiramiento de Hígado en brazos     100
Estiramiento de Corazón en brazos     101
Estiramiento de Intestino Delgado en brazos     102
Estiramiento de Estómago en brazos     103
Estiramiento de Triple Calentador en brazos     104
Estiramiento de Vesícula Biliar en brazos     105
Estiramiento de Intestino Grueso en brazos     106
Estiramiento de Bazo en piernas     107
Estiramiento de Intestino Delgado en piernas     108
Estiramiento de Maestro Corazón en piernas     109
Estiramiento de Hígado en piernas     110
Estiramiento de Riñón en piernas     111
Estiramiento de Vejiga en piernas, prono     112
Estiramiento de Corazón en piernas, prono     113
Estiramiento de Intestino Grueso en piernas, prono    114
Estiramiento de Estómago en piernas, prono     115
Estiramiento de Triple Calentador en piernas, prono     116
Estiramiento de Vesícula Biliar en piernas, prono     117
Transiciones
Transición de los cinco elementos     121
Transición de Agua     125
Transición de Agua     126
Transición de Agua     127
Transición de Madera     128
Transición de Madera     129
Transición de Fuego     130
Transición de Fuego     131
Transición de Tierra     132
Transición de Tierra     133
Transición de Metal     134
Transición de Metal     135

Liebre De Marzo
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