Tú eliges lo que comes
Referencia: 9788449331831
Cómo prevenir el sobrepeso y alimentarse bien en familia
Prólogo de Carlos González
Epílogo de Julio Basulto
En Tú eliges lo que comes, Carlos Casabona nos ayuda a perder peso y a no volver a ganarlo explicándonos cómo funciona nuestro organismo y detallando la composición de los alimentos de nuestra despensa. Un libro sobre alimentación y salud para toda la familia.
En los últimos años estamos asistiendo a un aumento alarmante del sobrepeso, sobre todo en niños. Las razones de esta tendencia tan perjudicial son varias, pero se podrían resumir en una: no sabemos elegir correctamente lo que comemos.
Con Tú eliges lo que comes aprenderá a escoger adecuadamente una alimentación sana y equilibrada. Además el autor le enseñará de forma fácil y comprensible a relacionar las calorías de muchos alimentos, postres, bebidas y snacks con el tiempo necesario para gastarlas, con actividades normales de la vida diaria o practicando deporte sin tener que sufrir. También podrá modificar sus hábitos para no ser atrapado por el deseo de comer productos industriales no saludables cuando «no toca» y comprenderá las claves psicológicas que usa la poderosa industria alimentaria para captar su atención.
Olvídese de dietas absurdas y complicadas, de pesar alimentos o de pasar hambre. En este libro no hay recetas de cocina ni brebajes extraños para adelgazar: sólo encontrará sentido común y libertad para elegir lo que come de manera consciente, con la dieta mediterránea como modelo.
Carlos Casabona (Zaragoza,1960)
se licenció en Medicina y Cirugía por la Universidad de Zaragoza en 1983 y cursó la especialidad de Pediatría en el Hospital Clínico Universitario de La Laguna durante cuatro años. Tras veinticinco años trabajando en atención primaria e interesado en la nutrición infantil y juvenil, ha decidido plasmar en un libro su amplia experiencia en la promoción de una alimentación saludable y en la prevención del sobrepeso de miles de niños que llevan un estilo de vida insano. Ha impartido numerosas charlas y conferencias en centros públicos y privados. También ha colaborado en programas de radio, periódicos, revistas (Ser Padres y Eroski consumer) y otros medios de comunicación.
336 páginas | Código: 10132906 | Formato: 15,5 x 23,3 cm.
Sumario
Prólogo del pediatra Carlos González 13
Abreviaturas 15
Introducción 17
PRIMERA PARTE
- 1. Algo de historia y de economía 27
¡Cómo hemos cambiado! 27
Conservar grasa nos ha ayudado a sobrevivir 28
Esta epidemia tiene pocos años 30
La industria alimentaria y las políticas sanitarias 32
¿Problema de ricos o de pobres? 36
El coste económico de las buenas calorías 38
- 2. Un poco de ciencia nutricional 45
Carbohidratos 45
Las grasas son buenas, ricas y necesarias 50
¡¡ Demasiadas proteínas!! 54
Mitos y dietas milagro 58
- 3. ¿Quién tiene la culpa del sobrepeso? 64
La gran paradoja 64
Acusados en el banquillo 68
Potenciadores del sabor 72
Bebidas azucaradas y zumos 76
Cereales para niños, ¿son sanos? 78
Comedores escolares 81
¿La voluntad es química? 84
Densidad energética: bombas calóricas 88
Patatas chips contra patatas hervidas 95
- 4. Etiquetas, publicidad y marketing 99
La reina de la fiesta 99
Etiquetas complicadas y a veces escondidas 104
El enemigo en casa 108
Metros contra centímetros en el súper 112
- 5. Calorías, sobrepeso y ejercicio 114
¿Cuántas calorías necesitamos? 114
Coste energético de la actividad física 125
Caminar, el mejor ejercicio y el más económico 127
El excesivo peso limita el ejercicio físico intenso 130
Sobrepeso infantil, riesgo innecesario 132
- 6. En la consulta del pediatra 139
La lactancia materna puede prevenir el sobrepesoinfantil 139
El IMC no lo es todo, la cintura también importa 141
Mi niño come «bien» y no tiene sobrepeso 148
Pequeños errores que pesan mucho 154
Solo como lo que me gusta 157
- 7. Buenas y malas costumbres 160
La despensa y la nevera 160
Comer despacio y masticar bien es importante 163
La bollería y las chuches ¿son premios? 165
Apagar la tele, la consola y la tableta 166
Dormir puede prevenir el sobrepeso y ayuda a desayunar mejor 169
Dieciocho consejos para no pasarnos comiendo 175
SEGUNDA PARTE
Cómo interpretar los esquemas 185
Objetivo: movernos cada día 191
«Entretenimientos basales», tareas cotidianas y actividad física 198
- Desayunos y bocadillos 206
- Bebidas, aperitivos y tapas 219
- Primeros platos 229
- Segundos platos 240
- Postres y meriendas 245
- Cenas 261
- Pizzas 266
- 8. Fast food (comida rápida) 274
- Chuches y palomitas en el cine 286
- Reflexiones finales 293
Epílogo de Julio Basulto 299
Apéndices (gráficas) 301
Índice alfabético 305
Agradecimientos 313
Notas para saber más 321
Prólogo del pediatra Carlos González
Desde hace unas décadas, la obesidad y el sobrepeso son los mayores problemas de salud que aquejan a los niños y jóvenes españoles. Las causas son muchas y en este libro se habla de ellas.
Como pediatra, lamento tener que reconocer que nuestra actividad, nuestro «control del niño sano», ha contribuido probablemente al desastre. Normas obsesivas, «A las 5 de la tarde, media pera, media manzana, medio plátano, el zumo de media naranja», cantidades absolutamente exageradas (¡yo no me comería todo eso!), que se recomiendan como si la vida y la salud del niño dependieran de acabarse hasta la última cucharada. La báscula y la curva de peso, que se han convertido en el «coco» de las madres, «la maldita báscula» y «el temido percentil», como me ha dicho más de una. La absurda insistencia en que «Está bajando de percentil», «Está por debajo de la media», «Está justo de peso», como si no fueran normales todos los percentiles, desde el 1 hasta el 100.
Dicen que los dioses a veces nos castigan dándonos exactamente lo que habíamos pedido. Tanta insistencia en que los niños engorden, y al final, ya lo ven, algunos han engordado.
Lo más curioso es que, en plena epidemia de obesidad infantil, muchísimas madres (tal vez la mayoría) siguen convencidas de que sus hijos «no les comen» porque no consiguen acabarse las exageradas cantidades que les han recomendado.
Desde hace años, los libros sobre alimentación son bestsellers en España. No los libros serios, por supuesto, sino las dietas absurdas con recomendaciones minuciosas y palabras altisonantes, desde el Paleolítico a las estrellas. Carlos Casabona, en cambio, ha escrito un libro serio e informativo que ayudará a muchas familias.
CARLOS GONZÁLEZ, pediatra y escritor
Introducción
Mientras los hombres sean libres para preguntar lo que deben; libres para decir lo que piensan; libres para pensar lo que quieran; la libertad nunca se perderá y la ciencia nunca retrocederá.
JULIUS ROBERT OPPENHEIMER
Este libro que ahora comienza no es únicamente un compendio de consejos nutricionales escrito por un médico; es también una pequeña crónica personal, como individuo inmerso en el ambiente obesógeno que se respira en la sociedad actual, que describe mi lucha interna desde hace tiempo contra un grupo de genes forjados durante miles y miles de años por la evolución. He recogido en él impresiones y experiencias de mi vida profesional que espero le sirvan ahora a usted, en pleno siglo xxi, en el que la esperanza de vida podría sobrepasar los 100 años, si sabemos combatir el deseo de comer lo que no es aconsejable, a cualquier hora y cualquier día, empujados por la ubicua presencia y el bombardeo incesante de publicidad realizada por expertos que forman parte de la poderosa y necesaria industria alimentaria, a la que debemos reconducir con actitud crítica, pero firme y constructiva. Tampoco pretendo que usted se convierta en un fundamentalista de la buena alimentación o, como dirían ahora muchos jóvenes, en un friki marginado en una sociedad que tira en un sentido incorrecto, ya que considero que podemos alimentarnos de manera saludable y a la vez disfrutar del placer de comer.
Usted se preguntará por qué un pediatra se dedica a escribir un libro sobre nutrición, y además se atreve a dar consejos de cómo no ganar peso y orientar tanto a los padres de niños con sobrepeso como a la población en general. ¿No es una tarea de dietistas-nu‑
tricionistas o endocrinólogos? ¿No hay demasiados libros sobre cómo adelgazar, sobre cómo alimentarse, sobre dietas milagrosas tan mediáticas como peligrosas? ¿No podemos encontrarlo todo en internet?
Desde los inicios de la pediatría como especialidad médica en el siglo XIX, la nutrición ha sido, y sigue siendo, la disciplina más importante y con mayor repercusión sobre el crecimiento y desarrollo del ser humano, desde el frágil recién nacido hasta el final de la adolescencia, hacia los 18 años aproximadamente. Durante decenios, la preocupación de la pediatría consistió en luchar contra la malnutrición causada por una alimentación escasa y/o deficitaria en nutrientes, o contra la desnutrición derivada del padecimiento de enfermedades diversas como diarreas crónicas y graves infecciones que han disminuido o han sido erradicadas gracias a las vacunas y a los avances de la farmacología, entre otros factores de orden higiénico, socioeconómico y cultural.
En la actualidad, todo ha cambiado, y el sobrepeso provocado por la sobrealimentación (hecho que niegan o minusvaloran los lobbies cuyo negocio consiste en vender comida procesada y bebidas azucaradas) se ha convertido en una epidemia silenciosa, indolora y, lamentablemente, aceptada y asumida con resignación e impotencia por parte de la comunidad sanitaria, que se ve incapaz de producir cambios eficaces en los hábitos de la sociedad contemporánea, para detener esta bomba de relojería que amenaza con desbordar los sistemas sanitarios de todo el planeta.
Intentaré exponer en pocas líneas la intención de este libro y por qué creo puede cubrir un hueco en la ingente bibliografía sobre obesidad y nutrición, y en la casi infinita cantidad de información que hay en internet, sin olvidar los numerosos programas de radio y televisión que dedican parte de sus contenidos al tema.
Las ideas que desarrollo en estas páginas se han ido gestando a lo largo de los últimos diez años de mi ejercicio profesional; teniendo en cuenta que llevo treinta años visitando niños sanos y enfermos, este período comprende la tercera parte de mi experiencia clínica. En un principio, pensé en realizar un estudio sobre la
obesidad infantil para publicar en alguna de las revistas especializadas en las que los profesionales sanitarios comunican a sus colegas y a la comunidad científica los resultados de sus trabajos; revistas exigentes y serias que dotan a dicha comunidad de un cuerpo más teórico que práctico por lo que respecta a la prevención y tratamiento del exceso de peso en la edad infantil y en la adolescencia. Después de leer cientos de trabajos y decenas de libros sobre nutrición, he creído más provechoso escribir un libro útil y atractivo visualmente, que sea de ayuda a las personas que no tienen tiempo de cocinar; a los padres que tienen a su hijo durante fines de semana alternos; al chico que saca una manzana de la mochila con temor de hacer el ridículo en el instituto; al ejecutivo estresado que pide en el bar un bollo o un cruasán con el café de media mañana para poder «ir tirando», ya que no tuvo tiempo de desayunar en casa; a todo aquel que se siente orgulloso de su prominente barriga, sin hacer caso a los consejos de su médico, que le recomienda bajar de peso porque puede tener un buen susto el día menos pensado.
Creo también que este libro será de interés para profesionales como dietistas-nutricionistas, graduados en enfermería, médicos de familia, jóvenes pediatras , etc., ya que así podrán disponer de una herramienta útil y muy visual con un enfoque algo diferente al desarrollado hasta ahora en las políticas sanitarias oficiales.
Me gustaría también que fuera una lectura interesante desde la primera página a la última; que se manche enseguida porque da vueltas por la cocina y el salón; que sea comentado en las redes y recomendado entre amigos; un libro que no aburra y que aporte información clara y concisa en cada una de sus páginas. Nuestra sociedad está acostumbrada al lenguaje de los medios audiovisuales, y mi mensaje, por ello, se apoya en atractivas fotografías, y aunque digan que «Una imagen vale más que 1.000 palabras», he escrito 82.661 con la intención de construir un sólido esqueleto que proporcione cohesión y solidez al conjunto. Una de las principales ideas consistirá en conocer: