El Estres Otras Alteraciones Emocionales Y Tu Dolor De Espalda

Seguramente te has preguntado alguna vez cómo es posible que se trasplanten órganos y extremidades y, sin embargo, la medicina sea incapaz de curar o mitigar tus dolores espalda. Cómo es posible que se indiquen tratamientos farmacológicos similares para el lumbago de un joven de veinticinco años y a una persona de setenta y cinco.
Cómo es posible que la mayoría de las dolencias músculo-esqueléticas sólo se traten de forma paliativa, actuando únicamente sobre los síntomas, sin vislumbrar que puede haber causas ocultas.
Cada dolencia que padecemos aparece por y para algo. Muchos desequilibrios en la salud no hacen más que expresar un desequilibrio, bien a nivel nutricional, bien a nivel psico-emocional y comportamental, y el sistema músculo-esquelético es una zona primordial donde se plasman esos desequilibrios.
La naturaleza, nuestro organismo, se rige por unas normas y códigos que no debemos contradecir.
La vida moderna y la autocomplacencia son un caldo de cultivo in-mejorable para no escuchar los mensajes de nuestro cuerpo.
La soberbia y los intereses económicos impiden a la medicina moderna corregir y complementar sus conocimientos con una visión más amplia, global y humanista.
Tu dolor de espalda es en muchas ocasiones una oportunidad, una llamada de atención para mirar hacia dentro y buscar en tus des-equilibrios. Si esta llamada persiste ¡NO LE DES LA ESPALDA!

Roberto Junquera (Bilbao 1970) lleva 20 años trabajando en el campo de la salud.
Diplomado en enfermería en 1992, con la especialidad de psiquiatría.
Diplomado en fisioterapia en 1995, formándose posteriormente en cadenas musculares y osteopatía, profundizando en el área visceral.
Desde el año 2000 desarrolla su trabajo sobre los problemas de espalda, influencia-do por la naturopatía y la medicina oriental, empeñado en demostrar la influencia de la nutrición y de las alteraciones emocionales sobre muchos de los problemas músculo-esqueléticos que trata en su consulta.
En esta obra ofrece muchos de sus cono-cimientos y experiencias adquiridas en los últimos años de trabajo intenso y apasionado, basado en una visión integral del ser humano, huyendo de la visón mecanicista y compartimentada que la medicina moderna maneja habitualmente, más aún en el campo del dolor músculo-esquelético.

NOTA DEL AUTOR

Todos los casos clínicos que brevemente se exponen en este libro son reales, sólo se cambian nombres y detalles personales con objeto de mantener la pertinente confidencialidad.
Algunos de los casos expuestos pueden parecer sorprenden-tes, incluso ilusorios, pero los expongo porque son representativos de algún concepto teórico que quiero explicar y nunca por hacer alarde de curaciones casi milagrosas. Cada acierto no es más que el resultado de muchos fracasos previos.
Ninguna de las ideas y teorías expuestas en los siguientes textos son inmutables, todo lo contrario, deberán ser revisadas, completadas, modificadas e incluso eliminadas; como dijo Ortega y
Gasset "además de enseñar, enseña a dudar de lo que has enseñado".

INTRODUCCIÓN

En las diferentes áreas de la medicina, y en concreto en las dolencias del sistema músculo-esquelétíco, disponemos de dos métodos para abordar los problemas; el primero es el occidental, el de la de medicina moderna, muy tecnificada y también muy práctica. Por ejemplo: en un desgaste avanza-do de cadera de una persona mayor, no se cuestiona qué ha pasado para que esa cadera se desgaste y la otra no, sino que se recambia mediante una prótesis con gran éxito. Igual de exitosa es la intervención que se realiza en situaciones de urgencia, traumáticas, (accidentes etc.) y no traumáticas (como una hernia discal con gran repercusión neurológica).
El éxito es innegable, ya que aunque no cure al paciente (puesto que en absoluto se ha actuado en un factor causal) se ha "parcheado" tan bien que resulta innecesaria cualquier otra consideración.
Pero, ¿qué pasa si aplicamos esta filosofía paliativa en otros procesos, en ocasiones no tan graves o urgentes pero sí muy molestos e incapacitantes y que tienen una causa concreta, aunque esta sea imperceptible o intangible?
No es aceptable que se trate de forma similar una cervicalgia aguda repetitiva de un joven, que una cervicalgia de un anciano. No es aceptable que lo paliativo se traslade a todas las patologías, que el único objetivo sea tapar los síntomas, porque éstos se muestran por algo y para algo, y taparlos,
además de no ser eficaz en muchas ocasiones ni tan siquiera a corto plazo, casi siempre resulta contraproducente a medio y a largo plazo. Es en las disfunciones o patologías funciona-les cuando el cuerpo todavía tiene capacidad de homeostasis, de autorreparación, cuando podemos intervenir con un tipo de medicina que no trate de tapar síntomas, sino de ayudar al organismo a completar un proceso de autorregulación, de homeostasis(homeostasis es la capacidad de nuestro organismo para auto-regularse y recuperar la salud).
En ocasiones es dificil saber cuándo una disfunción músculoesquelética está tan avanzada que ya no tiene marcha atrás y, por lo tanto, debemos conformarnos con mitigar los síntomas, o cuándo merece la pena un tratamiento holístico que devuelva al organismo a una situación de equilibrio y por tanto, asintomática. Esta disyuntiva sólo la resolveremos con conocimientos (y no sólo los de la medicina tecnificada), experiencia (probando y fallando se aprende), sentido común (que se aplica menos de lo deseable) y un poco de intuición (la que todo buen investigador debería poseer).
Por otra parte, todos los conocimientos de este libro primordialmente van destinados a esas personas ajenas al mundo de la medicina, pero que están interesadas en saber algo más sobre las dolencias musculares y articulares que padecen, desde una perspectiva diferente a la que se da desde la medicina convencional.
No cabe duda de que en muchas ocasiones se tratará de una visión complementaria, pero en otras tantas se vislumbrará una perspectiva opuesta a la de la medicina oficial. Indudablemente, estas versiones opuestas crean contradicciones,desasosiego, en aquel lector que no sabe "a quién creer". Pienso que no se trata de creer sino (le comprender observando a nuestro cuerpo, nuestras reacciones, los síntomas que padecemos, lo que sin duda nos conducirá a aumentar la conciencia de autocuidado, y a comprender que uno mismo puede ser su mejor médico manejando pequeñas pero muy molestas dolencias antes de que lleguen a procesos más graves (haciendo un poco de ejercicio, cuidando nuestra dieta, reflexionando sobre nuestros actos...). Esta actitud beneficiará nuestra autoestima, nuestra salud y sólo perjudicará a quien prefiere que estemos siempre medio enfermos, acobardados por nuestra salud y dependiendo, cuanto más mejor, de unos medicamentos y de la industria que los fabrica (no se trata de una posición extremista en contra de los medicamentos, pero sí de que, por ejemplo, los antiinflamatorios se usen de forma inconveniente, incluso perjudicial en la gran mayoría de las ocasiones).
Además, me gustaría influir en esa mayoría de fisioterapeutas a los que, como a mí, enseñaron —o mejor dicho, dictaron— que los músculos, fascias y articulaciones poco tienen que ver con la forma de ser, de pensar, de actuar, con el esta-do de ánimo, con lo que comemos, y a los que nos inculcaron que somos máquinas sofisticadas que únicamente nos averiamos por golpes, traumatismos repetitivos...
Finalmente, espero llegar a todo aquel terapeuta con la suficiente dosis de rebeldía y de inconformismo como para no creerse siempre la versión oficial, humildad para reconocer todo lo que nos falta por saber e iniciativa para preguntarse el porqué de las patologías que tratamos.
Buena parte del libro está enfocado a explicar conceptos poco familiares, extraídos de la medicina natural y oriental,
que son fundamentales para comprender los mensajes que nuestro cuerpo nos envía, muchas veces en forma de dolo-res musculares. También encontrarás algunas explicaciones de por qué muchos tratamientos, en teoría bien encamina-dos, no encuentran el resultado esperado, e incluso por qué muchos problemas músculo-esqueléticos aparentemente se curan solos, como "por arte de magia".
Mi intención no es ignorar la importancia a los factores físicos (traumáticos y microtraumáticos), posturales, etc. como génesis de muchas dolencias músculo-esqueléticas, sino des-tacar que con frecuencia coexisten con disfunciones viscerales que normalmente no se tienen en cuenta.
En diferentes capítulos de este libro encontrarás una dirección de internet, donde podrás acceder a explicaciones mediante video, sobre las zonas de nuestro cuerpo que pueden doler como reflejo de cada órgano alterado y sobre otros conceptos, que son de dificil comprensión si sólo se explican de forma escrita.
En cualquier caso si has decidido leer este libro es que tienes la curiosidad propia de cualquier científico por conocer cosas nuevas, pero por otro lado la sensación de que nuestra medicina moderna no te ofrece explicaciones convincentes sobre muchos de tus dolores musculares y articulares.
Quizás intuyes que al otro lado de la frontera de lo que te han enseñado hay algo más por descubrir.

Atreveos, el progreso sólo se logra así (Víctor Hugo)

ÍNDICE

Introducción     11
I- Aprendiendo a cambiar     15
II- ...Y cambiando el concepto de diagnóstico     19
III- Como analizar nuestros dolores desde un punto de vista global     23
IV- Dolores musculares y articulares como consecuencia del estrés y otras alteraciones emocionales     37
Riñón-vejiga     43
Hígado-vesícula biliar     67
Intestino delgado-sistema cardiocirculatorio     88
Estómago-bazo-páncreas     105
Pulmón-intestino grueso 116
V- El estrés     129
VI- La ansiedad     137
VII- Uso y abuso de medicamentos     139
VIII- La crisis curativa     145
IX- La fiebre     153
X- Importancia de la nutrición     157
XI- Alteración de la postura corporal debido al estrés     177
Conclusión     191
Bibliografía     193